Me Shuparon El Kulo 😔👊 Vhope. CANCELADA

6 //Namjin//

Maldita inseguridad que no me permite abrirte mi corazón, pero si lo hago, ¿podrías seguir amandome así como soy? Tengo miedo cariño, miedo de que me abandones cuando siento que más te necesito conmigo.

Te estoy mintiendo, y los mentirosos siempre pagan por sus actos.

...

Pasó por última vez el trapo por sobre la mesa, logrando dejarla completamente limpia, sonrió con autosuficiencia y satisfecho.

Mientras se dirigía a la cocina nuevamente movía sus caderas al son de la música, de vez en cuando inventandole pasos, imaginando la coreografía perfecta y a él bailando aquella canción frente a muchas personas que le aplaudirian por su gran talento.

Sus hombros se sacudieron, soltó una pequeña carcajada, se sentía feliz, libre, y lo estaba demostrando.

Sus pasos eran topes, nunca fué un gran bailarín aunque su sueño fuera ese, se sentía inspirado, todo indicaba que hoy sería uno de esos días en donde todo estaría bien.

Su respiración estaba agitada, la canción estaba por terminar, una última vuelta y al levantar la mano para hacer la pose mamalona del final, se escuchó un fuerte estruendo en el cielo, logrando distraer lo lo suficiente como para que su brazo se fuera de largo e hiciera caer el vaso favorito de su novio al suelo, rompiéndose en miles de piezas.

Sintió un pinchazo en la pierna, pero ignoró aquello, pues asustado se agachó al suelo intentando recojer los pedazos del vaso del rayo McQueen.

Mordió su labio, se maldecía internamente, Namjoon se enojaria y eso él lo sabía más que nadie.

Puso las piezas sobre la mesa, pero nuevamente volvió a sentir una punzada, esta vez en su mano, otra vez, lo ignoró y empezó a correr hacia el cuarto de Nam y él, donde tenía guardado un pegamento para zapatos, pero que quizás podría ayudarle a unir las piezas.

No esperó escuchar la lluvia caer a torrenciales derrepente, y menos el fuerte rugido que hacia la moto de su novio, estacionandose en la acera.

Se hiper ventiló, continuó corriendo rápidamente, debía arreglarlo antes de que Namjoon lo viera o esto llevaría a una muy esperada discusión que él prefería evitar.

Buscó en los cajones, para su suerte no recordaba donde carajos tenían el pegamento hasta que dió con el, suspiro de alivio pero fue entonces que la puerta principal se escuchó cerrar y el como unos firmes pasos resonaban en la Sala.

Tragó grueso y salió corriendo del cuarto, intentó llegar a la cocina antes que nada, pero ya era tarde.

Frente a él se encontraba Namjoon, completamente empapado y viendo su preciado vaso del rayo McQueen hecho trizas sobre la mesa.

Luego, aquellos filosos ojos se encontraron con los suyos y tembló, podía ver su enojo a kilómetros.

— Amor yo... —

No pudo acabar su frase pues el cuerpo de su novio se abalanzó con fuerza sobre el suyo haciéndolos caer de lleno al suelo, el menor siendo quien recibió el fuerte impacto del suelo.

Asustado vio al Moreno, no podía reconocerlo, sabía que se enojaria por el vasito, pero nunca lo había visto de esa manera - colérico -, estaba aterrado.

Sus ojos destellaban en un obscuro color Zafiro, ojos que lo escudriñaban con furia, adsorviendole el alma y dejándolo sin aliento y temblando del miedo.

Sentía su frágil cuerpo como si se tratase de una gelatina, que temblaba ante el más mínimo toque que hicieran contra él.

Tragó grueso e intentó hacer alguna técnica ninja para calmarlo, no sabía lo que sucedía y empezaba a cuestionar fuertemente si su amado novio era un humano o algo más.