Hay un cuento

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Antes de empezar quería decirles que habrá tres narradores en esta historia: El de (t/n), Alex y por último yo 💞

Bienvenidos y espero disfruten esta historia tan bonita 🌼

Bienvenidos y espero disfruten esta historia tan bonita 🌼

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En la vida ocurren cosas que no podemos controlar. Cosas que no pedimos exactamente.
Por distintas razones de la vida (t/n), una niña muy dulce, alegre y soñadora, termina viviendo en la mansión Morales. Una gran casa, con muchas habitaciones donde podrían vivir una familia de cincuenta personas muy cómoda. En este caso solo eran dos padres y una hija, Mara. Ella tenía una habitación grande y tenía absolutamente todo lo que quería. Siempre estaba pidiendo más y más. Que ya ni sabía todo lo que tenía, pero siempre quería más. Sus padres no sabían pero la estaban malcriando al darle absolutamente todo.
Y ... ¿(t/n)? A ella no le importaba en lo más mínimo lo material. Su corazón era feliz a pesar de las injusticias de la vida. Siempre estaba muy contenta y a pesar de que la casa era inmensa, ella vivía hasta arriba. En la terraza. Donde todos la veían como un lugar frío y oscuro pero a (t/n) le encantaba. Como una niña soñadora se sentía como una princesa en una torre alta. Con la esperanza de que algún día alguien subiera y la rescatara. Nunca perdió la fe.

Un día la pequeña y malcriada Mara sube a la terraza de (t/n) con una pequeña farola.

-Alguien está en problemas.- decía para ella misma mientras recorría todo el lugar con la mirada.

No podía creer que alguien pudiera vivir en aquel lugar. Buscaba algo, y no era cualquier algo. Quería encontrar el diario de (t/n). Se acerca hasta donde estaba su cama rodeada de una gran fortaleza de metal. Busca bajo su almohada y las sábanas tratando de no revolver todo y que ella se diese cuenta. Aunque Mara pensaba que igual no lo notaría porque era la persona más distraída que conocía.
Mara daba vueltas por todo el lugar buscando el famoso diario. Estaba asustada porque escuchaba demasiados ruidos fuertes que parecían provenir de todos lados y a la vez de ningún. Cuando estaba por rendirse, con el zapato descubrió una superficie que parecía más débil que el suelo duro. Alumbró con su farola y se fijó que era una puerta secreta. Se agacha y abre con esmero aquella puerta. Adentro estaba el diario y Mara no podría estar más feliz.

-¡El diario de (t/n)! - exclamo Mara sacando aquel diario y levantándose del suelo.- por fin voy a conocer todos tus secretos.- abre el diario y está dispuesta a leerlo.

Mara se ve interrumpida cuando escucha un ruido de que alguien está subiendo. Se escucha alguien a los lejos que viene cantando con mucho entusiasmo. Mara se apresura y cómo puede tira el diario de nuevo a su escondite y cierra la pequeña puerta

- co-co-corazones contentos - entra (t/n) cantando con mucha felicidad.-...Co-co-corazones al viento. Co-co...- (t/n) se da cuenta que Mara está ahí. Se alegra demasiado.- ¡Mara! Que raro vos acá. Nunca te gustó subir a mi terraza.

-Es que aquí hace mucho frío y está todo tan oscuro.- dice Mara caminando por el lugar. Le molestaba aquel globo en forma de corazón que llevaba (t/n) en su muñeca amarrador.  Ella se frotaba los brazos por el frío- Pero igual yo tenía muchas ganas de jugar con vos.- dijo Mara cruzándose de brazos.

Princesa de la terraza (Alex y tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora