Querido diario:
Llevo ya dos meses tranquila.
Y como mis amigas me han perdonado por haber estado ausente, se podría decir que todo es normal.... Se podría.
Pero a la vez, puedo decir que llevo dos meses muerta de hambre, sufriendo en silencio, molestando a gente a la que no le intereso lo más mínimo. Llevo dos meses deseando desaparecer y acabar con todo.
La comida se queda en mi garganta, deseando salir al exterior, lloro hasta quedarme dormida y, como siempre, sufro en silencio, sola, mi vida es MÍA y de NADIE MÁS.
Sigo en contacto con Ana, una vieja amiga que no es tan vieja al parecer. Nuestra amistad duró mucho, ¿sabes?
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La marioneta
Teen FictionNos dejamos manipular por gente, pero sobre todo por pensamientos y por las percepciones que cada uno tiene.