La marioneta

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Juntas... Eran una bomba para mi cuerpo, si creía que con Ana no era suficiente, las dos juntas iban a alterar mi organismo, pero al final lo conseguiría, sería perfecta.

" Odio a las princesas que se quejan por la caída del cabello, ¿no se dan cuenta de que ese cabello les pesa mucho y se refleja en la báscula? ¡POR ALGO TE LO VOY A QUITAR! Tranquila, no estarás calva, solo que el poco cabello que te dejaré será muy frágil, fino y seco.
No llores, no te asustes, no te quejes de que se cae mucho, además, fíjate bien, tus pechos, tu espalda, tu abdomen, lo que te quito de la cabeza lo pongo en tu cuerpo, muy pero que muy finito y sin peso. ¡ Es que me da frío dentro de ti! Y no hay calorías que me mantengan caliente, por eso hice esa capa de vellos, ¡NO TE QUEJES! Ni siquiera se notan, es para mi, para lograr mantenerme dentro de ti."

Era demasiado, no podía más.

Me dijo que estaría muy triste, ya no solo porque me vea gorda sino por una cosa en mi cabeza que se llama depresión. "Debemos cuidarnos mucho de ella, por que esa te hace tragar como un verdadero cerdo! Ahora solo te importa bajar de peso ¡NADA MÁS! ya nada tiene sentido, ni tus amigos, ni tu familia, ni tu escuela, NADA, solo yo."