- ¡¿que dijiste maldito?! - grito al ser llamado de esa forma.
- eso es lo que eres... un simple híbrido - con un movimiento elegante, de sus dedos salio una especie de látigo.
Inuyasha se dio la vuelta y dio un salto para esquivar el ataque, alistando sus garras empezó a correr en dirección a él. Una lucha empezó entre ellos. Inuyasha intentaba darle a sesshomaru con sus garras de acero y de sangre, pero fallaba con cada intento.
- maldito, deja de moverte - tratando de herirlo.
- hump débil - de un movimiento elegante y ágil a la vez, se puso detrás de inuyasha y con sus garras venenosas le raspo la espalda. Inuyasha puso un pie adelante para no perder el equilibrio sintiendo su espalda arder. Furioso se da la vuelta y antes de que diera un ataque él lleva una mano a su cuello - hueles diferente - comento llevando su nariz al cuello de él - ¿que eres?
- ¿de que... hablas? - pregunto con dificultad, sintiendo cosquilleo en esa parte del cuello.
- no eres un híbrido común... - volvió a olfatear - eres de otra especie... *se quien me puede sacar de esa duda* - le sujeta de la muñeca llevándole con él.
- oye, que pretendes - forzando su mano para que le libere - suéltame, si quieres pelear no me lleves a otro lado.
- eres muy ruidoso - con una vena en su frente - cállate - y de un solo golpe le dejo inconsciente.
- inuyasha ten cuidado, cuida a rin por mi - la voz de ella apareció en su mente antes de caer a la inconsciencia.
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