Capítulo Cinco

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El poco trayecto que quedó, no hacía más que la incomodidad y el silencio se tornará en el ambiente. Tratando de ignorarlo, me acerque aún más a la ventana y me limite a escuchar el galopeo de los caballos mientras que en mis ojos veía cada vez más cerca la academia

...

Al final había llegado. Mire en dirección a Derek y como era obvio el me ignoro. La puerta fue abierta por nuestro ginete y Derek salió empujando de él.

-- Ou~Lo lamento su majestad! --Dijo el ginete haciendo una reverencia.

-- No necesitas disculparte, la culpa no fue tuya --dije acercándome a la puerta.

Enseguida el se reincorporó y me ofreció la mano ayudándome a bajar de la carroza.

-- Lo lamento, su majestad --dijo haciendo la reverencia pero está vez hacia a mí

-- Y-Ya te dije que no es necesario disculparte --dije sonriendo un poco

-- No es eso..., su majestad... Si me permite decírselo... Oí toda la conversación que tuvo con el rey Derek.

Su voz se oía nerviosa y se aclaraba su tartamudeo y yo al escucharlo decir eso, fue tan...

-- No te preocupes, estaré bien. --dije sonriendo-- Gracias por traernos, nos vemos yotaru

Pude ver su rostro sorprendido de haber mencionado su nombre. Lo cual supongo que es normal, ya que ningun noble o alguien más alto de la realeza se dirige así con sus sirvientes dirigiéndose con sus nombres.

Finalmente llegaron dos personas con trajes militarizado llegando un tercero con una hoja

-- Usted debe ser la reina Eve llinoniel vonthaliel, por favor. Díganos que hacer, estamos a su servicio --dijo inclinándose haciendo un tipo de reverencia

-- Bueno... Gracias. Podrían ayudarme con mi equipaje, por favor --dije lo mas amable posible

-- Por supuesto, soldados ya escucharon. ¡Cada uno lleve un...

Palidecio su palabra al ver el equipaje que traía. Más de 30 maletas gigantes esperaban a los pobres 3 soldados, que miraban con miedo mi equipaje. Yo me reí avergonzada, ya que yo no hice esto. Lo hizo mi padre diciendo:

-- ¡¿Qué les sucede?!, ¡¿Acaso creen que ese poco equipaje será más que suficiente para mí princesa?!, ¡Mi hija debe presumir que es una auténtica reina y no hay nada mejor que los vestidos!, ¡Así que no pierdan el tiempo!

Y así resulte tener más de 30 maletas llenas de vestidos. Aunque me gustaría tener tan solo un pantalón

-- Bu-Bueno, se los encargo --ellos solo asintieron. Quisiera ayudarlos, pero no pude cargar siquiera uno

Decidí a delantarme y ayudar de manera diferente. Esta vez pidiendo la localidad de mi nuevo cuarto.

Me acerque a la peñeta recepción que había en el lugar. Al acercarme había una mujer mayor de los treinta pero muy atractiva. Vestía el mismo uniforme que los soldados, solamente que su placa era diferente

-- Ho-Hola, disculpe ¿Podría decirme donde queda mi nueva habitación?. Agradecería su ayuda --dije tratando de sonar lo más amigable posible

Soy La Villana De Un Juego Otome, Pero No Quiero Ese Destinó Donde viven las historias. Descúbrelo ahora