capítulo dieciocho.

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— fresa.

— no.

— chocolate.

— no.

namjoon bufó. — ¡no tengo idea!

— sigue intentando.

— ¡zarzamora!

— ¡namjoon!

llevaba diez minutos afuera de la heladería a la que namjoon me llevó, me preguntó mi sabor de helado favorito; obvio no le dije nada, tenía que adivinar.

tenía que hacerlo.

— te daré solo dos oportunidades más, si no adivinas, compraremos otra cosa.

el me rodó los ojos. — pero yo quiero un helado.

— de acuerdo. — dije riéndome — pero que conste que no lo pudiste adivinar.

pedimos nuestros helados, y nos sentamos en una mesa larga afuera de la heladería.

— ¿puedo probar?

lo miré.

— no seas asqueroso. — solté una risa.

— no sabía que te gustaba el helado de nuez.

me encogí de hombros. — pues me gusta, no sabía que te gustaba la fresa.

— me veo más como de chocolate, ¿verdad?

— no, algo más como rompope.

el río.

tenía alrededor de dos horas con namjoon, habíamos caminado un poco, también platicamos sobre películas nuevas, música, en realidad, teníamos gustos muy parecidos.

— no me gusta pink floyd.

— a mi tampoco, por eso no fui el año pasado al concierto con rosé y kenna.

— me invitaron también, pero no quise ir.

— ¿te gusta bruno mars?

— ¡me encanta! — dijo dándole una lambida a su helado — tengo un gran debate entre si prefiero versace on the floor o locked out of heaven.

— ¡me fascina locked out of heaven! pero creo que mi favorita definitivamente es grenade.

— ¿sabías que bruno, literalmente jaló el piano todo el video? o sea, no usó doble, nada era edición, era real, y según bien recuerdo, se lastimó la espalda y tuvo que ir al doctor.

reí, no sabía lo curioso que era.

después de terminar nuestros helados, comenzamos a caminar sin rumbo, solo caminábamos por la plaza a la que me llevó. había mucha gente, niños jugando, padres viéndolos, había hasta gente mayor, nunca había venido, de verdad se veía agradable. miré hacia los lados a ver si encontraba algún árbol de limón, pero no encontré ninguno, solo habían flores.

me detuve al ver unas pequeñas flores tiernas apenas floreciendo, eran color rosado, y tenían leves toques morados. — ¿te gustan las flores?

— no exactamente.

sonreí al imaginar cómo jin se hubiera vuelto loco al verlas, así que saqué mi celular y tomé una foto para mandársela.

mira, venia caminando y encontré estás preciosas, me recordaron a ti.

— no me gustan las flores, tienen muchos mosquitos y bichitos por todos lados.

— no todas los tienen.

민들레 ; kim seokjin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora