SIN LÍMITES

CAPITULO 7: UNA DOLOROSA DESPEDIDA.

Sebastian se fue de la fiesta, estaba muy asustado, no sabia qué era lo que iba a ocurrir con su futuro, y sobre todo arrepentido.

Entro a la casa y estaban todas las luces apagadas, fue a su habitación y las cosas de Josefa no estaban, la perrita de Josefa no estaba, en cambio solo estaba el perro que era de Sebastian. Sebastian se sentó en la cama y se puso a llorar, se fue a la cocina muy mal emocionalmente, se preparo un jugador natural y este se le cayo encima, él no pensaba, no estaba cuerdo. Tenia todo su pelo manchado con jugo de fresas y se fue directo a la ducha, estaba echándose el shampoo y de pronto resbalo en la tina del baño y comenzó a llorar desconsoladamente, no era el mejor momento el que estaba viviendo, tenia mucha rabia, y mientras lloraba sus recuerdos de niñez se le seguían viniendo a la mente, algo que lo hacia llorar aun mas fuerte, mientras su perrito lloraba con el, sin comprender porque su amo estaba tan mal, por lo que su hocico lo puso bajo su mano que colgaba de la tina del baño y le comenzó a besar, buscando que Sebastian le hiciera cariño, pero no había caso, esto lo hacia ponerse aun peor.

Sebastian con todo el pelo mojado y en bóxers se fue a la cama, su perro dormía a su lado, Samuel no podía dormir pensando en lo que estaba pasando su amigo que muy abandonado tenia, Samuel observaba a Nicolette aferrado a el con su pijama rosa, y eso le transmitía aunque sea un poco de calma, Agustin dormía plácidamente junto a Antonia, Matias que tenia a toda su familia en su contra paso la noche en el departamento de Benjamin antes de volver a Estados Unidos, Matias no podía dormir, observaba desde el sofá la ventana, el reflejo de la luna en el ventanal, algo que lo ponía aun mas triste, Felipe tampoco podía dormir, sin saber de que forma ayudar a su hermano, y Benjamin dormía profundamente.

Todos dormían y de pronto sonó el teléfono, Samuel se levanto a revisar su celular, Matias hizo lo mismo al igual que Felipe, Sebastian tomo el celular para ponerlo en silencio y se dio cuenta de que la persona que le escribía era alguien especial.

Cada uno desde su móvil leyeron el mensaje que decía:

"Hola, habla la mama de Renata, le escribo para informarle que mi hija ha fallecido debido al cáncer que atravesaba desde hace años, por lo que queremos cumplirle su ultimo deseo que nos pidió antes de morir, que es que todos sus amigos de la infancia estén junto a ella en la ceremonia, por lo que los esperamos, ya les hemos depositado el dinero para que compren un pasaje en el primer avión que encuentren, los esperamos".

Todos al leer el mensaje se levantaron de la cama y se empezaron a preparar para viajar, Matias, Benjamin y Felipe desde Chile, Sebastian desde Italia y Samuel junto a Agustin desde Inglaterra.

Samuel y Agustin iban en el avión, como era costumbre, Samuel en la ventana antes de que le den mareos, Sebastian en su Jett privado iba viendo fotos suyas junto a Renata, recordando toda su historia, el viaje a Bariloche, las quimioterapias, las fiestas en donde ella siempre se destacaba por ser la mas linda, Sebastian por momentos sonreía viendo las fotos, como también se ponía muy triste.

Felipe iba nervioso en su avión, nervioso de volver a ver a su hermano y los demás, no sabia como iban a reaccionar al verlo, y en el asiento del pasillo iba Matias muy afectado aun por la muerte de su padre y todo lo que ocurrió, reconociendo el grave error que cometió, cuando lo dejo y luego no lo llamo mas hasta que falleció, el rencor fue su peor enemigo y termino rompiéndole el corazón mas de lo que ya estaba roto, roto producto de los errores que cometió y del daño que el ocasiono.

Samuel y Agustin llegaron al aeropuerto, un aeropuerto muy elegante, tomaron el vehículo que les había enviado los padres de Renata y se fueron con dirección al hotel, Samuel estaba nervioso, desde el fallecimiento de sus padres que se prometio jamas volver a entrar en un cementerio, cosa que deberá hacer.

Agustin lo observaba en todo momento sabiendo que esto no seria del todo fácil para él.

- Te felicito hermano, sé que esto no es fácil pero al menos lo estas enfrentando.

Samuel observo a Agustin y le agradeció sin elevar del todo su voz producto de sus nervios.

Unas horas mas tardes aterrizo el Jett privado de Sebastian siendo recibido por la prensa en la que todas las preguntas apuntaban al video de su infidelidad, Sebastian sin decir nada se subió al jeep junto a su escolta personal y se fueron rumbo al hotel. Sebastian iba en el jeep y lee un mensaje de su representante, de Pirlo, que le dice qué deben hablar, Sebastian ya tenia claro que podía ocurrir así que lo único que hizo fue ignorar su mensaje, ponerse sus audífonos y escuchar música.

Luego de un rato, llego Benjamin, Felipe y Matias, se hospedaron en la respectiva habitación y se quedaron allí un rato.

Ninguno sabe quienes han llegado respectivamente.

Samuel y Agustin están muriendo de calor, ambos sin polera intentando encontrar algún canal de televisión que no hablen árabe, lo cual es imposible.

- Duchate, para luego ducharme, debemos ir a cenar a las ocho.- Dijo Samuel mientras bebía un extraño jugo de maracuya.

Todos se comenzaban a arreglar para cenar. Los primeros en bajar con un traje bastante elegante fueron Agustin y Samuel, ambos ubican a lo lejos la mesa en donde estaban sentados los padres de Renata y desde pasillo vieron a Matias, Benjamin y a Felipe, este ultimo se quedo de pie mirando hacia todas partes hasta que en la otra esquina del comedor vio a Samuel, Agustin al ver a Felipe, miro a Samuel y le dijo:

- Ve a saludarlo, este es el momento.

Samuel se fue caminando hacia el, al igual que Felipe hacia el, ambos se quedaron mirando fijamente, Samuel saludo y luego Felipe hizo lo mismo, a Samuel le comenzó a correr una lagrima al igual que a Felipe, y sin pensarlo dos veces se dieron un fuerte abrazo, ambos muy emocionados, habían pasado años desde la ultima vez que se habían visto, lo cual esto era un reencuentro bastante emotivo.

Todos se reencuentran, a excepción de Sebastian, todos pensaban que el aun no llegaba. Todos se saludaron afectuosamente y se sentaron a comer de unos platos bastantes anormales o no muy típicos que digamos.

- Bueno, quizás no comprenden muy bien el porque los cite un dia antes de la ceremonia, es solo que queremos cumplir el ultimo anhelo que tenia nuestra hija, que era verlos a todos juntos, en especial a los que estuvieron con ella en todo momento, desde el viaje a Bariloche hasta el dia en que nos fuimos de Chile, en sus habitaciones ella les dejo unas cartas a Samuel, Felipe, Matias, Chovar y a Sebastian, a todo esto, ¿por que Sebastian no bajo a comer?.

Ahi todos descubrieron que en realidad Sebastian si había llegado, solo que no quiso bajar a comer.

Felipe al escuchar el nombre de Chovar se sintió un poco apenado y le dijo:

- Lo siento pero...Chovar falleció hace unos años, creí que Renata lo sabia.

Los padres se miraron y le dijeron:

- Lo sentimos mucho, si quieres te la podemos entregar a ti, eres la persona indicada para tener su carta.

Felipe asintió emocionado y cuando llego a su habitación tenia dos cartas sobre su cama, la que le correspondía y la de Chovar.