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꒰ 〄 ꒱

La mañana llegó y Yoongi se dirigió al centro comercial, rápidamente yendo a la pequeña juguetería donde trabajaba aquel chico, perdiéndose un poco al no recordar la dirección a la perfección.

Cuando por fin pudo llegar, estaba cerrado.

"No puede ser"

Miró su reloj y vio la hora, 9:13am. Se dijo a sí mismo que tal vez era muy temprano y abrirían más tarde. Pero, rayos, había pospuesto varias consultas a la tarde por venir en la mañana a buscar la foto. Rezaba para que abrieran lo más pronto posible, se sentó en una banca que había cerca de allí, recargando sus antebrazos sobre sus rodillas a la vez que suspiraba con frustración.

Pasó gran parte de la noche pensando en su amigo Taehyung y en cómo recuperaría la fotografía. Imaginando escenarios donde la recuperaba y otros donde la perdía para siempre. Estaba cansado.

Cerró sus ojos un momento, abriéndolos nuevamente y encontrándose con TaeTae de pie frente a él. El pequeño niño le sonreía amablemente y él permaneció quieto, atónito. El chiquillo se mantenía en silencio, hace mucho tiempo que olvidó la voz de Taehyung y su subconsciente no podía hacer más por él que proyectarlo en absoluto silencio. El niño agrandó su sonrisa, riendo sin emitir ningún sonido, cuando se detuvo se acercó a Yoongi y le abrazó, llegando a sentir la calidez que emanaba su cuerpecito. Al separarse, el niño agitó su mano, despidiéndose, y comenzó a correr, desapareciendo sin más.

Yoongi abrió los ojos, cansado.

"¿Por cuanto tiempo estuve dormido?"

Miró la hora en su reloj, 10: 47. Pasó sus manos por su rostro, suspirando sonoramente.

Dirigió su vista a la tienda, ya habían abierto. Se levantó velozmente y se acercó a la puerta, entrando y encontrándose con una mujer mayor detrás de la caja registradora. Recorrió con su vista toda la tienda, buscando alguna señal del castaño pero no lo halló.

—Disculpe, ¿ha venido hoy un chico castaño, moreno y alto? —preguntó Yoongi posando sus pálidas manos sobre el mostrador.

La mujer sonrió amablemente— Oh, no. Mi nieto no ha venido hoy —negó con la cabeza—. ¿Puedo saber quien lo busca?

Yoongi enmudeció, ¿acaso era necesario presentarse? Él sólo quería saber si aquel chico tenía su fotografía.

—Min Yoongi —contestó con voz dudosa.

La mujer asintió lentamente— Ya veo... ¿has perdido una fotografía, verdad?

El semblante de Yoongi pasó de estar dudoso a sorprendido. ¿Acaso el chico le habló de la foto a su abuela?

—Sí, ¿cómo lo sabe? —inclinó un poco su cabeza.

—Taehyung me lo dijo.

Yoongi quedó petrificado— ¿Perdón?

La mujer rió— Mi nieto, Taehyung, me dijo que había encontrado una fotografía ayer en el ascensor, que por lo visto le pertenece a usted.

El más pálido perdió el aliento por un segundo, seguidamente soltando un suspiro. Al menos la foto no estaba perdida... no del todo.

Pero ahora se sentía demasiado extraño con la increíble casualidad que el chico moreno tuviese el mismo nombre y la misma sonrisa que Taehyung.

—¿Vendrá más tarde? —preguntó ansioso.

La mujer negó con pena— Se ha ido a visitar a sus padres en Daegu.

"¿Daegu?"

𝐎𝐭𝐫𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚 ᎒᎒ YoontaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora