Sabores Agridulces | Herophine

cap.36 - Entrégate y amame

Estaba nerviosa no voy a negarlo pero se que esto es lo que quiero y necesito, así que estoy preparada.

El metió su mano dentro de mi vestido y acaricio mis muslos. Se separo unos segundos y me miró a los ojos antes de quitarme por completo el vestido.

Yo aproveché que estábamos separados para quitar su camisa y comenzar a besar su cuello ganandome leves gemidos por su parte.

Me acuesta y se sube arriba de mi. Quita mis bragas y sin avisar mete un dedo en mi interior robándome un grito.

Comienza a mover su dedo lentamente convirtiendo todo en una dolorosa y placentera tortura. Metió otro dedo y comenzó a moverlo rápidamente llevándome al orgasmo.

- ¿Estás segura de que quieres hacerlo? Sabes que puedo esperar

- Estoy segura

Me quito el sostén y lo tiro al piso. Se deshizo de sus pantalones y su boxer.

Saco un condón que había en un cajón. Bueno aquí la gente acostumbra a solo venir a follar así que supongo que por eso tenían condones.

Se colocó el condón y poco a poco se fue introduciendo dentro de mi. Al principio sentí cierto dolor pero poco a poco este fue desapareciendo para convertirse en placer.

El comienza moverse llevándonos a los dos a un orgasmo realmente fascinante.

Cuando el sale de mi interior le doy un corto beso y sonrió.

Me levanto con cuidado y me coloco mi pijama. Miró las sábanas y noto que no hay rastros de sangre pero tampoco me sorprende mucho. Hay mujeres que no sangran a la primera vez.

- Guardaré esa sábana por el resto de mi vida - Digo rompiendo el silencio

- Como quieras - Pero se ríe y me entrega las sábanas

- Gracias - Le sonrió

Tomo las sábanas, las doblo y las guardo en mi ropero.

- Creo que tendremos que comprar nuevas sábanas, la cama no se puede quedar sin ellas - Me dice Pero

- Si, claro

- Mañana vamos?

- Ajá - Respondo

- ¿Estás bien? - Me pregunta preocupado

- Si, ¿porque?

- No se, te noto rara, ¿Te has arrepentido ya? - Me mira ¿Triste?

- No claro que no, solo que me siento rara ¿Sabes?

- No eres la única - Ríe

- Claro - Lo mire - Tengo sueño

- Vamos a dormir, ya es tarde y mañana tenemos que madrugar antes de que tú madre nos vea comprando sábanas nuevas y sospeche que algo a pasado

- Si, tienes razón

Nos acostamos y no dejo de repasar una y mil veces que hoy es la mejor noche de mi vida.

☆ﾟ.*･｡ﾟ

Me desperté y no ví a Hero por ningún lado. Me alarme de inmediato pero se abrió la puerta y me encontré con Hero con unas sábanas en la mano.

- ¿Quieres hacer algo hoy? Es que he quedado con mi prima - Me dice

- Mmm pues pensaba pasar tiempo con mi madre

- Bien

- Bien

- ¿Quieres que te lleve a dónde quiera que vallas a ir? - Pregunta

- Si, está bien - Sonrió

- Perfecto - me devuelve la sonrisa

- Voy a ir a decirle a mi madre ya vuelvo

- Te espero

Fui a la habitación donde Hero me dijo que se hospedaba mi madre y en efecto ahí estaba ella.

- ¿Pasa algo cariño? - Pregunto

- No nada mamá

- ¿Entonces?

- Pues quería ver si querías pasar un día de madre e hija, Hero tiene planes con su prima así que tendremos todo el día para nosotras solas

- Me parece estupendo cariño - Me sonrió

-  Entonces en unos minutos paso por ti ¿Si?

Mi madre asintió y yo me fui pero escuche unos gritos al fondo y como la gran chismosa que fui me acerque lentamente para escuchar.

Sinceramente lo que escuche me dejó muda.