LO QUE PESA EL AMOR // NayKook

9 (.-.)

Maratón (1/4)

NY.-.

Me levante de la cama como a las ¿8 o 9?, y... para es como que lo estoy logrando, deje de levantarme a las cinco, y pues tengo que hacerle caso al nutricionista.

No he sabido nada de él, hoy era viernes y digamos, bueno es un hecho estoy logrando que mi cuerpo se controle a esto de las cosas sin grasa.

Tomando todo el día agua, para tenerme hidratada y debes en cuando un estiramiento de todo el cuerpo de diez minutos no más.

Aplausos por favor, lo estoy logrando.

Cinco días pasaron, lo llevo contando desde ese día, y bueno me siento bien, otra cosa que quiero aprender es componer, he hecho letras, varias a decir verdad y las he estado vendiendo por Internet, ganando un poco.

Y bueno, Jeongyeon tiene razón, todo de apoco, metas pequeñas y luego harás las grandes.

Me bañe y me puse un polo grande blanco y buzo azul noche con rallas blancas a los lados, entrando a mi clase online.

(...)

En plena clase mi celular empezaba a sonar, viendo que era un número desconocido, colgando a la primera y respondiendo a la segunda vez que volvió a sonar.

Como joden.

- ¿Quién habla? -pregunte apagando la cámara.

- Jeon Jungkook -aleje mi celular para verificar el número y volver a apoyarlo en mi oreja.

- Solo conozco a uno, diga más de usted -fruncí mis cejas.

- La persona que más odia en el mundo, que llamo idiota, que llego tarde, que...

- ya, ya, ya sé quién es -suspire- ¿Para qué llama?

- Me acorde que nunca le dije específicamente que comer, ¿A comido?

- Pues si he comido, pero he comido porciones pequeñas, dejando de lado las frituras, grasa o envoltorios... como más fruta que otra cosa y bueno agua -mire la pantalla viendo que el profesor estaba escribiendo, imitándolo, poniendo en alta voz mi celular.

- ¿Le parece si hoy vamos de compras?

Mire mi celular sin dejar de fruncir mis cejas.

- No tengo cocina, vivo en un cuarto y mini nevera que no debería de tener -intente sonar obvia.

- Mmh... ¿Entonces me acompaña a mí a comprar? Y hablamos de lo que deberías comer o recomiendo, ya que no solamente es comer fruta -sentí lo último más como un regaño.

- ¿Hoy día dice? -mire la hora, lo cual ya había pasado una hora desde que me levante.

- Si...

- Si no tengo nada que hacer, pero ¿A qué hora seria? -abrí la aplicación de alarma esperando a que contestará.

- ¿cinco de la tarde?

- Mmh... -dude, la última vez que salí aun con la luz del día, fue esa vez que conocí a aquella chica, que debes en cuando me hablo- Esta bien, tengo que cambiar -Lo último susurre jugando con el hilo de mi polo.

- Bien, no vemos y lleve paraguas hoy va a llover -Colgó.

Mire la pantalla de mi celular prenderse, ya que deje de tocarlo, pues la alarma un poco antes como veinte minutos y seguí con la clase.

(...)

Mi alarma sonó indicándome que en unos veinte minutos debo estar allá.

Me puse unas zapatillas Nike negras con blanco dejando la ropa aun que tengo y descolgué del ropero un saco negro de tela liviana.

Agarre una mini mochila guarde lo necesario, escribiéndole a Yoo si podía llevarme, aunque luego elimine el mensaje, ya que no sabía dónde.

- ¿Ahora qué hago? -me rasque la cabeza mirando mi celular.

Busque el contacto de Jeon Jungkook y marqué, esperando a que respondiera.

- Nayeon, menos mal llamabas, te quería decir que era en el mercado Chan-in...

- Está bien.

Apague mi celular, colgando y saliendo, no era necesario que Jeongyeon me llevará, está cerca a ese lugar.

Abrí la puerta de mi cuarto yendo a los pasillo, y agarrando un cubre boca negro antes rápidamente, y poniéndome aquello de la misma manera.

Busque las escaleras de emergencia y salí por ahí.

- Mierda mis audífonos -retrocedí y pare- aish se me hace tarde, ah...

Suspire y seguí bajando las escaleras, llegando como a la cochera y saliendo de ella a pasos veloces.

Salí de lo que vendría ser el lugar donde me quedo a causa de cosas y seguí caminando, por las calles algo vacías.

Y ni bien crucé las dos calles llegue al mercado, viendo que eran las cinco en punto.

Baje mi barbijo para tomar algo de aire y mirar al cielo, alzando mis manos a mi boca calentándolas con mi aliento y sobándolas rápidamente. Subí mi barbijo y gire mi cabeza encontrándome a una persona mirándome... asustándome, era poca la distancia que nos separaba un metro a decir verdad.

- Llegaste temprano -gire mi cuerpo hacia el otro lado viendo a Jugkook parado con un carrito, viendo que sus ojos se posaron detrás de mí y me gire viendo a la otra persona alejarse y volver a girarme para seguir viéndolo.

- Si llegué -retrocedí un paso- vamos me congelo aquí -me estremecí por el pequeño aire que sentí en mi rostro.

- ¿trajiste un paraguas? -me escaneo y negué olvidando por completo esa cosa que está ahora colgando en la puerta de mi baño, y viendo negar riendo- y te lo dije.

- Me comprare uno aquí, pero entremos -tiemble- no aguanto este frío.

- Está bien, está bien -asiéndose a un lado, haciéndome entender que entrará primero.

- Está loco -rodee los ojos importándome muy poco su gesto, me estaba helando, busque alguna nevera de cosas calientes y la encontré, girándome donde esta Jugkook- Oye, me pediré una malteada caliente -señale aquel aparato donde varias personas pasaban y se servían lo que sea que fuese caliente.

- Te espero en la zona de yo...

Y me fui, sabiendo que era Yogurt donde estaría, busqué en mi mini mochila mi monedero y saque la cantidad que pedía el aparato y luego sirviéndome.

Ni bien tuve la cosa caliente en mis palmas, la tuve hay un buen rato, queriendo que mis manos se calentaran o bajando el frío. Vi una estantería de bolsas de arena, que servían para calentar tus manos y compre unas.

Camine por todo lugar hasta ver el lugar de yogurt viendo antes una estantería de guantes y sin dudar tome unas.

- Gracias -susurre.

Me puse la tela en mis manos y seguí bebiendo de mi vaso, poniéndome detrás del jonkook... creo que lo estoy pronunciando mal.

- Ya volví -vi cómo se giraba- me queda poco -extendí mi vaso de chocolate- ¿Quiere?

- Gracias -lo agarro y bebió de una.

Vi que en carrito había todo tipo de yogurt, haciéndome abrir los ojos y girar a mirarlo.

- ¿Es necesario todo eso? -señale el carrito.

- Sí, ¿Por qué? -miro lo señalado y luego me miro- no es mucho -se encogió de hombros.

Abrí mi boca asombrada, atónita por sus palabras.

- ahí descuento -intente ser comprensiva buscando el cartón de descuento.

- No hay descuento -lo mire y negué.

- Mmh...

¿Qué puedo hacer?, el que explotara su nevera será el yo no...

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_I am yellow for you