9.¿Quien te crees?

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Me desperté ya con más ánimos, el dolor en mis piernas ya no era tan intenso como el de ayer, así que me puse un short de mezclilla a la cintura y una blusa blanca holgada. Deje mi cabello suelto con ondas.

Con suma seguridad caminaba por los pasillos, atrayendo miradas. Adoraba esto.

Localice a Ezequiel, quien sacaba libros de su casillero.

Debería ser contra la ley que use ese tipo de pantalones - pensé - debido a las hormonas que había en mi interior.

-¿Qué decidiste Am? - le susurre en el oído por detrás, haciéndolo voltear bruscamente.

-Primero...aléjate - me hizo a un lado - Y segundo ¿Por qué me dices Am? - pregunto sin entender.

-Am... por amargado - solté una carcajada.

-Mira...- dijo con fastidio - Ya es bastante difícil tener que soportarte, así que trata de guardar tus estúpidas bromas - cerro de un fuerte golpe su casillero.

-Tratare - le dije sonriente - ¿Entonces? - pregunte caminando detrás de el con ligeros pasos - ¿Tu casa o mi casa?

-Tendrá que ser en la mía - dijo de mala gana sin voltear a verme.

-Perfecto - canturreé y entre a mi siguiente clase.

Las clases pasaron muy rápido, como siempre Noah me ayudaba a distraerme y hacerme un poco más divertido las últimas horas.

-¿De verdad te llevara a su casa? - pregunto.

-Si, solo para hacer la inútil guía de física - le explique - el chico sigue resistiéndose a mis encantos - ambos reímos.

-Te lo dije - sonrió victorioso - Es mejor que te rindas.

-Mira...en cuanto menos te lo esperes - lo señale - lo voy a tener detrás mío. - sonreí

Fui de las ultimas en salir. Reuní pacientemente todas mis cosas. La verdad no tenía prisa, además con suerte y hacia enojar a Ezequiel.

Deje la mayoría de mis libros en mi casillero, afortunadamente no había tanta tarea, solo unos cuantos problemas de matemáticas y algunos resúmenes. Caminaba hacia la salida del edificio y no lograba ver a Ezequiel. - Más vale que no te hayas ido Jones... - pensé mientras lo buscaba por el campus.

-Tu no te preocupes que tenemos todo el día - dijo una voz sarcástica sacándome de mis pensamientos.

-Te estaba buscando - le dije sonriente.

-Si, como sea - rodo los ojos y comenzó a caminar.

Salimos del colegio y caminamos hacia el estacionamiento.

-Sígueme - me indico mientras se subía a su motocicleta.

¡Dios mío! Lo que tiene de amargado, lo tiene de sexy - pensé mientras lo veía. Sacudí levemente la cabeza, para salir de mis pensamientos.

-S...Sí - le conteste.

Camine hacia mi auto y lance mi bolsa en el asiento trasero, solo tenia alfo de dificultar al tratar de seguir la alta velocidad de Ezequiel. De pronto se subió a la acera, estaciono su motocicleta ahí, aunque no parecía su casa, seguramente seria su trabajo. Me estacione y baje no muy segura.

-Espérame - me dijo antes de entrar a una tienda de música. De todas formas, entre detrás de él.

-¡Ezequiel! - un castaño detrás del mostrador le saludo - ¡Wow! ¿Y tu eres? - le dio la vuelta a Ezequiel y se acercó a mí.

-Nadie, no es nadie - Ezequiel lo tomo del cuello de la camisa y lo regreso al mostrador.

-Concéntrate en tu trabajo - le ordenó

La Apuesta [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora