Mírame • Jung Jaehyun

Cap • 1

Corría, corría sin parar, tenía tan solo 9 años, ¿Qué haría ahora ella sola en el mundo? No tenia a nadie ni le quedaba nada, lágrimas caían de sus ojos, ¿acaso estaba soñando? Pellizco varias veces su mejilla con la esperanza de que nada fuera real y todo fuera una de esas estúpidas pesadillas recurrentes que tenía pero la diferencia es que esta vez no despertaba, todo esto era real, ¿que se supone que haría ahora ella?

El pitido de la alarma despertó a eojin, su vista se nubló y lágrimas de sus ojos empezaron a salir sin control, había perdido la cuenta de la de veces que su mente proyectaba en sus sueños aquel día que para ella podía considerarse el peor de su existencia, cada vez que lo recordaba no podía evitar llorar.

Miró la hora, eran las 7:10 de la mañana, limpió un poco las lágrimas de sus ojos y mientras pensaba en lo que iba a pasar hoy, hoy empezaba su nueva vida, por primera vez desde hace bastante tiempo volvería al instituto, tenía una mezcla de sensaciones, se sentía extraña y a la vez emocionada, nueva escuela, nuevos compañeros, nuevo apellido...

Bajo las escaleras hasta el comedor donde se encontraba desayunando el hijo de la señora kim, kim doyoung, su familia adoptiva, eojin llevaba solo un par de meses con su ahora familia y todavía no se acostumbraba, claro que le encantaba la idea de haber salido por fin de aquel maldito orfanato pero en su corazón todavía no superaba el asesinato de sus padres y su hermano mayor, cada vez que lo recordaba sus pensamientos se nublaban y la tristeza invadía su corazón y con ella los recuerdos de aquel maldito día.

Dejo de pensar en ello y terminó de bajar las escaleras fingiendo una sonrisa.

-Buenos días doyoung

Doyoung la miró y le dedicó una sonrisa.

-Buenos días eojin, ¿Estás lista para empezar el instituto?
-La verdad es que si, estoy emocionada, por fin podré ser una adolescente normal.

Doyoung miró a eojin con tristeza, sabía por todo lo que había tenido que pasar la chica y sabía que para ella iba a ser difícil empezar todo desde 0,  pero él la ayudaría en todo lo que pudiera.

-Recuerda que vamos al mismo instituto, no estaremos en la misma clase pero al menos puedes estar segura de que no estarás sola, me tienes a mi, te presentaré a mis amigos y mis amigos serán también los tuyos.

Eojin agradeció a doyoung todo, el chico se portaba muy bien con ella, estaba feliz de formar parte de la familia kim, su ahora madre era un amor de persona al igual que su ahora hermano, tenía la familia perfecta.

eojin comió su desayuno rápido y le pidió a doyoung el uniforme del instituto, doyoung fue a su habitación y tomó el uniforme que su madre le dio a él ayer para que se lo diera a la chica porque como siempre ella no podía ya que salía a trabajar muy temprano y llegaba muy tarde, lo tomo y se lo dio a la eojin, ella subió a su habitación, se cambió, peino su cabello y arregló un poco su cansado rostro con algo de maquillaje, volvió a bajar y se encontró con un doyoung sonriente esperándola para ir hasta el instituto, se puso su mochila en la espalda y salió junto al chico.

la antigua eojin murió, hoy empezaba de cero, tenía una última oportunidad para por fin disfrutar de la vida, SU vida...