Otro aburrido día empezó en mi romántica historia de amor, no me mal entiendan, mi relación es todo menos aburrida lo único aburrido es tener que estudiar un lunes por la mañana, es solo que odio los lunes...
(***)
Llegué temprano pues Lincoln me llevó a la universidad en el auto, le agradezco por tan acto de bondad... (Ella no suele llegar temprano a la universidad y cuando ella llega temprano es por que Lincoln la lleva personalmente)
Ya que en este mes el clima suele ser traicionero decidí vestirme con un vestido naranja adornado con detalles de pétalos de rosas de color blanc, en mi brazo derecho tenía un bolso blanco donde llevaba mis cuadernos, usaba un shocker negro, usaba sandalias color blanco hacían juego con mi cabello. Puede que el lunes sea un día aburrido pero no significa que yo también lo sea.
Al llegar al salón donde recibiría mi gloriosos estudios de contabilidad, un paso mas y seré agradecida con la ambrosía de la contabilidad. Cuando me gradúe trabajare con una gran empresa y ganaré más dinero de lo que Lincoln gana, luego lo llevaré a ese lindo motel que sale en los anuncios después de la lucha libre independiente, donde lo emborracharé hasta que ya no pueda decir ni jota, para luego dibujarle un pito en la cara, luego le tomaré fotos y lo guardaré en mi álbum de la excelencia, un álbum que me hace recordar que Lincoln no es perfecto.
(Liberty se deleitaba en sus delirios así que no pudo notar que atrás de ella se encontraba una chica rubia de largos cabellos, de ojos azules, mirada fría y penetrante, usaba un suéter cuello de tortuga color crema, en su brazo un maletín de cuero color negro y una falda color rojo sangre, además de llevar medias negras que tapaban sus piernas y muslos, sus zapatos era negros y parecían ser deportivas.)
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—No puedo creer que empiece con esos delirios tan temprano.. —Pensó la chica al ver a la peliblancos hacer muecas en el aire mientras balbuceaba con los ojos cerrados.
(***)
Las clases transcurrían y Liberty junto a la rubia compartían una misma mesa, miraban con aburrimiento la clase de derecho mercantil, su maestro era un señor de la tercera edad el cual aunque era bueno en la materia e impartía la clase de una magnífica manera, el probema es que a Liberty y a su amiga les aburría esa clase...
—Brunhilda... —Liberty le susurraba a la rubia mas ella la ignoraba, Liberty se molestó y bajó su mano para picar los costados de la rubia—. Brunhilda...
Liberty seguía picando a la rubia ella se miraba molesta y parecían estar aguantando unas terribles ganas de gritarle a la peliblanco, pero ella era fuerte y no se dejaría vencer por ella, así que siguió ignorando a Liberty.
