Ciego. FINALIZADA.

002

Una salida

-Gus... ¿Puedo?.- Su hermano le pedía que le dejara pintarle las uñas.

-vale, ¿negras? O ¿rojas? De qué color, aunque las azules no se ven mal, me gustaría verlas morado- Gustabo parecía indeciso, aunque no las vería quería pensar que se le verían bien.

-¿Arcoíris?- Horacio sugirió, sabiendo que fuera lo que dijera él se las pintaría así.

-Si, si me gusta el arcoíris.

Fue lo último que salió de su boca por qué sintió las dos manos de su hermano tomar la suya y guiarla a la mesa, las separó un poco y comenzó a pintarlas, Rojo, naranja, amarillo, verde, azul, morado, se le miraban muy bien- No muevas tu mano, te las puedes despintar -Horacio le hablo suave, tomando su otra mano y ponerla en la mesa, hizo lo mismo, las manos de Gustabo estaban coloridas, solo esperaría a que se secaran y lo llevaría a presumirlas por la calle.
Sería ciego pero aún podía divertirse.

-¿Listo?- pregunto Gustabo sin mover mucho sus manos.

-Si, solo espera a que sequen, te quedaron increíbles- Miro la cara de su hermano, este miraba sus manos, como si quisiera ver cómo habían quedado sus uñas.

-Se ven bien, me siento bien. -Gustabo sonrió, no las veía pero sabía que se veían bien- ¿Que tal un poco de maquillaje?, Siempre me maquilladas cuando teníamos día libre, practicaban con mi cara, ¿por qué no lo haces?- Gustabo quería hacer feliz a su hermano y quería ser feliz.

-¡SI! Eres y serás mi modelo, mi muso para inspirarme- se escuchó como este corría a su habitación, los pasos rápidos cada vez se iban alejando, hasta que ya no se escucharon.

-Quiero verlo... Se escucha muy feliz, quiero ver su carita por última vez... Quiero ver mis uñas y la ropa que escoge por mi... Quiero verlo, solo una vez- Sonrió triste, acerco sus manos y sopló las uñas secándolas, volvió a escuchar las posadas de su hermano subir a la sala, escuchó como se acercaba a el.

-Va a ser sencillo, ya sabes al natural. Como a ti te gusta.- Horacio siempre lo maquillaba con colores muy suaves, y está no sería la excepción.

-Si, con rosas y cafés- sonrió un poco al sentir como la esponja del maquillaje golpeaba suavemente su cara.
Aquel corrector en su cara fue difuminado, se veía muy bien, no se veía como si estuviera maquillado.

-Tal vez un poco de azul en vez de... No mejor si café, el café se te ve mejor.- Horacio le acaricio su cabello.

-Si, me gustaba cuando mi cabello era café, pero el rubio se ve mejor ¿A qué si?- Le sonrió, haciendo que el sombreado se desaliniera.

-¡Gustabo!- Se rió, -A ti todo se te ve bien. -Borro con cuidado la imperfección y siguió maquillando a su hermano.

(...)

-Horacio, no estás maquillado tan exageradamente ¿Verdad?.

-...no.- lo estaba, no se le miraba mal, jamás se le veía mal pero era mal visto por algunos el que el hombre se maquille, pero eran muy pocos.

-joder Horacio, está bien. ¿Salimos?- Tomo su su bastón y sonrió a el chico frente a el.

(...)

Los dos iban en su carro Auidi, cantando sus canciones preferidas, deteniéndose en algunos lugares para bailar y sentirlas.

Se estaban divirtiendo, escucharon como otro coche se estacionaba detrás de ellos, los dos sujetos tenían armas, así que Horacio arrancó a toda velocidad asustando a Gustabo.

-¿Que sucede, Horacio?- pregunto alarmado.

-llama a papá, rápido.- Horacio le acercó rápido el celular.

Gustabo lo cogió pulsando el botón de encendido, les habían disparado, quebraron el vidrio de atrás de ellos.

“Siri llama a Tío Tom”
-"llamando a Tío Tom"

Daba curvas muy salvajes, llegando a perder por unos momentos a los de aquel vehículo.

-¿Que pasa?

La voz de conway los alivio un poco.

-Papu, ¡nos matan!- Grito Gustabo.

-¿Que coño?, ¡Manden la ubicación!

Gustabo le pasaba el teléfono a Horacio para que le mandara la ubicación.

Por la otra línea se escuchó unos disparos y después se cortó la llamada.

Conway estaba preocupado, más por Gustabo, ¿Cómo se protegería?.

(...)

-Ahg!- se quejo Gustabo - joder... ¿Horacio?- no sentía a Horacio cerca suyo, le preocupaba estar solo, le preocupaba no estar cerca de su hermano. -¿HORACIO?- Grito, mientras se quitaba con cuidado el cinturón. Se habían volcado.

Sintió unas manos cubrir su boca y rodear su cintura. Desesperadamente quiso alejarse, le había asustado, estaba asustado.

(...)

-¿Horacio?... ¿¡Dónde está Gustabo!?.

-No lo sé, Conway.- es la primera vez que Horacio le llamaba conway.- Alguien debió haberlo raptado...

Golpeó con fuerza el auto hundiendo un poco la lámina y lastimandose los nudillos.

Horacio se metió al coche patrulla de Conway -Escuchen, Aquí Inspector Horacio, en cualquier atraco, persecución, detencion quiero que sea informada, ha Sido capturado el Ex Inspector Gustabo, algún rastro de el, la información a el Superintendente, a los comisarios o A mí, ¿Entendido?- había hablado demasiado serio, que hasta Conway se vio sorprendido.

-Ya escucharon nenas.- hablo el súper después de Horacio.

Recibiendo un “10-4” o ”copiado” de toda la malla.

(...)

Ya había pasado Dos días desde que habían raptado a Gustabo. No tenían mucho de dónde sacar, Pablito, Segismundo Y Trujillo buscaban desesperados.

Horacio, no sonreía, estaba muy serio, los alumnos que llegaban por cargadores, vendas o salian/entraban de servicio, tenían del aura tan prepotente de el Inspector Jefe Horacio.

-¿Alguna novedad?- hablo a el comisario Volkov, quien volteó a verlo.

Volkov había sufrido un escalofrío por todo su cuerpo, su miraba perforaba su alma. -No... Aún no hay nada.

El golpe resonó por toda la recepción, haciendo que todos los presentes voltearon con miedo, Horacio había golpeado la mesa de recepción con mucha fuerza, saliendo de ese lugar.

“joto, tengo una pista de Gustabo” Pablito le había mandado un mensaje.

“Ubicacion”

-Conway, tengo una pista.- Horacio hablo por radio.

-Bien- respondió Conway.

“Ubicacion📌"

Sonrió subiéndose a su patrulla Héroe.

(...)

Los disparos habían terminado, vaya lugar de mierda en el que se encontraban, ni tenían una buena posición, pero estaban muy bien escondidos.

Entraron a la cabaña casi en pedazos, encontrando a un Gustabo con un costal en su cabeza, temblando, en aquella silla, el costal tenía sangre, posiblemente de el, su brazos y piernas parecían muy golpeadas igual.

-¡No!- grito asustado Gustabo -¡No diré nada!- se removía de la silla en busca de ”zafarse” de los nudos de la cuerda.

-Soy yo, Horacio, Papá está conmigo.- Hablo Gustabo suave. Acercándose a él.

-¿Papu?, ¿Horacio?- sollozo, sabía que lo salvarían.

_____________________________

No sé si lo dije pero será una historia corta, XD

Tardo mucho en actualizar pero es que mi imaginación e inspiración está basada en la luna. Cuando no la veo no puedo XD.

No normalicen la violencia.
Solo shippeo píxeles.
No tóxicos.