Podía sentirla cada vez más mojada. Pero _______... ella no se quedaba atrás por así decirlo. Su erección era única. Nunca se había sentido tan necesitada de hacerle el amor, al parecer, el tiempo había hecho que sus ganas fluyeran más y más. Habían pasado muchas noches en las que había tenido que contentarse con un beso o una simple caricia. Pero podía, y ahora lo demostraba, estaba enamorada y había comprendido que aquello se trataba más que de un simple gusto carnal.
Sin embargo, su erección crecía. Mientras empujaba sus dedos contra ella, notaba también el palpitar de su polla. Una excelente perspectiva de como la haría gritar en unos minutos. Pues no aguantaría mucho. Percibía que en cualquier momento perdería el control.
- Sí, oh... Dios mío... - gimió Billie.
Su interior le avisaba que pronto se correría en las manos de esa Diosa griega que conocía muy bien cómo llegar a su orgasmo.
- Más fuerte. Dilo, Dilo Billie, dime que te gusta todo esto... - la vista de _______ se nubló por completo. Una desesperación muy fuerte invadió su cuerpo entero. Bajó la cabeza, sus pantalones la estaban aprisionando. – nena... necesito hacer algo... - le dijo. Y sacó de improviso ambos dedos de entre el coño de Billie. Esta soltó un gemido en desaprobación, pero a continuación... lo que _______ haría solo le brindaría más placer visual.
Se bajó los pantalones y el bóxer a la misma vez y se quitó el bra deportivo que tenía. La boca de Billie se abrió de inmediato.
- Cierra esa boquita. – le pidió _______. Billie hizo lo que ella le ordenaba.
La erección de _______ cubría todas sus expectativas. No podía negar que cada vez le sorprendía más el tamaño que podía llegar a tener y todo gracias a ella. ¿Cómo podía excitarla de tal manera?
- Oh... - gimió _______. Sus manos apretaron su pene. A la vez, los ojos de Billie se abrieron sin perderse de nada.
La mano derecha de _______ se movió rápidamente sobre su larga polla hasta llegar al glande. Rápido, muy rápido. Los bíceps del mismo brazo se tensaron ante la práctica. Pero no se detenía.
- Oh nena... - gimió fuerte y cerró los ojos. La visión de Billie se había cubierto de placer. – sé que te gusta... tanto como a mí... - dijo sin detener sus manos. Al mismo tiempo, empezó a movilizar sus caderas al ritmo de sus apretones. Su ritmo no cesaba. – mierda... - logró articular, cerrando los ojos con fuerza. – voy a llegar...
Entonces, Billie se sintió en la necesidad de hacerla terminar en otra parte. Acercó sin timidez su boca a él. Abrió un poco y reemplazó las manos de _______ con las suyas. Esta se quedó perpleja. Pero no tuvo tiempo de asimilar su sorpresa, pues Billie había empezado a mover su lengua alrededor de su glande.
- ¡Sí, oh... joder, sí! – gritó insaciable. La lengua de Billie la torturaba moviéndose en pequeños círculos, mientras sus pequeñas manos la arropaban sin dejar de agitar su polla. – voy a correrme... - le advirtió. - Billie, por favor... voy a correrme... - dijo una vez más, pero no era capaz de hacer algo para detenerla. – no quieres esto...
- Sí... sí quiero... - logró decir ella. – déjame terminar...
- Que no, gatita, por favor... - le rogó _______. La cogió de ambos brazos y la hizo regresar a su posición normal. – voy a ser yo quien hará que te corras... también... - bajó la mirada y observó toda su esperma saliendo a borbotones. Vaya... había llegado tan rápido. Y podía ver a Billie aún campante y sin haberse corrido como ella. Pues no le duraría mucho. – hey... - hizo que Billie la mirara y dejara de observar su erección exprimiéndose. – faltas tú.
No dejaría que ella no cumpliera parte de su tarea. Debía correrse. Era lo que cualquier mujer buscaba, que la hiciera llegar al punto máximo... cuando quisiera.
- Ven aquí. – posicionó sus manos bajo los muslos de Billie y cargó su cuerpo. Las piernas de ella le enredaron la espalda, al igual que su lengua se enredaba con la suya ahí arriba. Caminó un poco, con Billie en brazos y logró llegar al borde de la cama de ambas. Soltó el cuerpo de ella, haciéndolo caer boca arriba. Una sonrisa traviesa invadió el rostro de Billie.
- Ven... - la llamó con las manos.
- Lo haré. – le dijo _______. – pero quiero que te des vuelta, preciosa. - Billie abrió un poco más los ojos. No iba a negarse. Hizo exactamente lo que _______ le estaba pidiendo. Se dio vuelta y acostó su rostro de lado. – eso es... – relamió los labios al observar el bonito culo de Billie aún envuelto en ese hilo. – me gusta. – caminó de rodillas en toda la cama hasta llegar a ella. – sube un poco, cariño. – le dijo palmeándole el culo.
Billie obedeció y ajustó un poco más sus piernas. – buena chica. – acarició una de sus nalgas con las manos y se inclinó un poco para besar una de ellas. La sensación era jodidamente exquisita. Billie hizo la cabeza para atrás, soltando un suspiro. – voy a hacértelo nena. – enredó sus dedos en la banda de la ropa interior de Billie. – esto te queda muy bien. – le dijo y le dio una palmada más. Esta vez más fuerte. Billie gimió un poco más. – te va a gustar... - bajó suavemente y disfrutando cada escena el diminuto hilo de Billie hasta hacerlo caer sobre sus muslos.
- ¿Qué... qué vas a hacer? – preguntó ella con dificultad.
- Va a gustarte, te lo prometo mi amor. – le dijo con sinceridad. Billie volteó el rostro, pudo divisar la aún grandísima erección de _______ rozando sus nalgas. Oh...Dios mío...
- Pero...
- Confía en mí bonita.
Aunque quería negarse, algo muy dentro de ella hacía que no le exigiera nada a _______. Sabía que si le decía que parara, lo haría y no experimentarían eso... que ella siempre había temido, pero que ahora por alguna razón no se atrevía a rechazar.
- ¿Quieres hacer esto? – le preguntó _______, asomándose y brindándole un tierno beso en el cuello. Billie lo pensó dos veces. ¿Pero qué pensaba? Joder, era _______. La mujer con la que vivía, por la que moría, por la que había hecho hasta lo imposible. la que se había ganado su confianza. Tragó saliva. No podía vivir con miedo toda la vida. Además, el sexo anal no era nada del otro mundo.
- Sí. – afirmó con seguridad.
- Saldrá bien, te lo prometo. – volvió a posicionarse detrás de ella y acomodó sus manos sobre sus caderas. – si te duele mucho... solo debes decirme, sabes que no te haría daño.
Billie volvió a asentir. Pronto, escuchó un "Vale" de entre los labios de _______. La sintió moverse tras ella y acomodar sus manos en sus caderas. Siempre supo que habría una persona especial con la que experimentaría estas cosas. De ese modo, había encontrado a la indicada.
Cerró los ojos con fuerza y aferró sus manos entre las sábanas de la cama. De pronto, sintió a _______ ponerse de pie y coger algo posicionado en uno de los cajones de la mesita de noche. Lo escuchó abrir el empaque. Un preservativo.
La espera se hacía jodidamente eterna. Pero no sentía miedo. Ya no. No con ella.
- Listo... - susurró _______. Volvió sus manos a las caderas de Billie y se las apretó con fuerza. Ella volvió a enterrar su rostro entre las sabanas y cerró los ojos suavemente esta vez. A continuación, sintió el miembro de _______ hundirse lentamente entre su ano. Abrió un poco los labios y apretó las sábanas. Joder... sí podía con esto. Vamos, sí podía. Se apretó los labios y dejó que esta siguiera con lo suyo. El miembro de _______ se hundió un poco más, hasta llegar al límite, pero siempre con mucha delicadeza. Ya adentro, lo sacó de nuevo con el mismo ritmo. Y de esa misma manera, lo hizo una vez más. - ¿te duele? – le preguntó. Si escuchaba un "sí" por respuesta, se detendría aunque sabía que tendría que terminar por su cuenta. La sensación que le generaba hacérselo por atrás era asombrosa. Billie no dejaba de sorprenderla.
- No... - negó ella. Hizo la cabeza para atrás y suspiro con delicadeza. – sigue, por favor... - le dijo. _______ relamió sus labios, le apretó un poco más las caderas y se introdujo en ella una vez más. Primero lento y sencillo, para después hacer más intensa su faena. Movió un poco más rápido. Billie era muy estrecha ahí atrás. Por suerte había utilizado condón.
Deslizó su miembro y lo dejó salir. Esta era la sensación más placentera que había experimentado jamás. Y podía notar, que para Billie era lo mismo. La escuchaba gemir con fuerza mientras se hundía en ella una y otra vez.
- Joder, _______... me corro... - le avisó. Pero no podía moverse. Sus caderas quedarían marcadas por los dedos de esa mujer que hoy la estaba follando de una manera nueva. Y que sobre todo, la estaba ayudando una vez más a superar sus miedos.
Sintió su orgasmo correrse por entre sus piernas. Había llegado. Una vez más. Con ella y solo ella. Ese efecto solo lo podía efectuar _______ y lo que en ella producía. Ese efecto, de correrse tan placenteramente con la mujer que amaba.
Se extendió sobre la cama y soltó un suspiro al sentirse aliviada. Mientras atrás, la misma mujer que había conocido hace meses, la abrazaba suavemente y la arropaba entre sus brazos dejando._
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Tentation 2 (Billie Eilish y Tu) G!P
Fanfiction¿Lista para ser parte de esto? Esta historia no es mia yo solo la estoy adaptando todos los creditos y derechos a su escritora original