Fall In Love [Arte I]

Capítulo 5

—¡Deseo hablar con el gerente!—azota la caja sobre el mostrador sobresaltandome.—¿Cómo es posible que no tengan un buen servicio en este lugar? ¡Siempre es lo mismo con ustedes!

—Señor, tranquilo, ya le dijimos que no es posible hacer la devolución ya que el error fue...

—¡Llama al gerente o llamaré a la policía!

¿Trabajo sencillo? Claro.

Veo a Wesley llegar con otro hombre bien vestido como todos los trabajadores del lugar, pantalones negros de vestir, camisa perfectamente blanca y saco negro con una placa dorada que porta su nombre. Me recibe con una sonrisa y me ofrece su mano.

—Es un gusto conocerla, mi nombre es Aaron y soy el gerente el lugar, Becker me comentaba que le interesa el trabajo que nosotros ofrecemos.

Asiento sin saber bien que decir. Se encuentra tran tranquilo en medio de aquellos gritos de ese señor. Yo estuviera llorando en su lugar.

—S-Sí, eh...

—¡Tú!

Me sobresalto de nuevo.

Aaron, el gerente, voltea a ver al señor con la misma sonrisa amable y se acerca para charlar con él sobre su problema. Para bien de todos los presentes, logra calmarlo mientras lo lleva afuera del lugar.

Sí, definitivamente merece ese gran puesto.

—¿Aún quieres trabajar?—escucho decir a Wesley detrás de mí en tono de burla.

—Trabajo es trabajo—volteo a verlo.—creo que puedo soportarlo.

Sonríe divertido.

Aaron aparece de nuevo, arreglando su traje mientras sonríe con amabilidad.

—Bien, ¿En qué nos quedamos?

—Ah, yo... Quisiera el trabajo, ¿Qué necesito? ¿Una solicitud?

Sonríe satisfecho.

—Me gusta tu entusiasmo. Bien, puedes traer tu solicitud mañana por la mañana, te haré una entrevista y veremos...—sonríe de nuevo y voltea a ver a Wesley.—por el contrario, Wes, comienzas hoy.

Se marcha observando todo con cautela.

Las llaves del auto aparecen frente a mis ojos moviéndose de un lado a otro.

—Sabes conducir, ¿No? Mi turno terminará a las diez.

Asiento mientras las tomo.

—¿Crees que consiga el trabajo?

—Mmm...—me mira de pies a cabeza.—tal vez, muéstrame tu mejor sonrisa

Frunzo el ceño ante eso, él me hace una seña para que haga lo que me pide, ruedo los ojos y sonrío lo mejor que puedo.

—Brillante, si fuera por mí, comenzarías ahora mismo—me sonríe tratando de animarme.—lo único que importa aquí es, una bonita cara con una bonita sonrisa y listo.

Hago una mueca.

—Bueno, me voy a cambiar, no llegues tarde.

Asiento y me dirijo hacia la salida.

No es tan diferente a tratar con personas que quieren comer helado, en todas partes hay gente que se cree superior.

¿Dónde dejó el auto?

Me detengo a mitad del estacionamiento mirando a todas partes con las llaves en mano, alzandolas como si así hiciera que el auto saliera.

Comienzo a presionar el botón para seguir el sonido del auto, veo a una chica recargada sobre un pequeño auto verde, de brazos cruzados hablando con un chico que se encuentra recargado en el auto de Wesley. Perfecto, un señor insultando empleados y ahora una pareja con problemas.