No pasa nada

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Cuando se avecinan los problemas, si es que se le puede llamar problemas. Porque la verdad siempre pensé que había cosas peores que las que me tocaban afrontar.
Bueno ¿En qué estaba? Ah sí... Cuando se avecinan los problemas quiero ser como ese gato cubista que hice para el colegio hace unos años. Ese que copié de internet porque no tenía la creatividad suficiente como para inventar uno propio. Ese que se ve ahí tan recto y tan plano. Pero a la vez se lo ve relajado y tranquilo, también un poco indiferente. Justo es eso lo que me gusta, porque está tan indiferente a lo que pasa a su alrededor, tan feliz en su mundo de figuras geométricas. Lo que pasa a su alrededor no va a alterar lo que hay ahí adentro.
Me gustaría ser como el. Qué todo lo que pase me importe un pedo. Que al final del día pueda irme a la cama sin pensar en todo lo que pasó. Y que al otro día me levante como si todo está bien.

~Ash Rymer

Historias absurdas nunca antes contadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora