Cʀᴇo Quᴇ Tᴇ Aᴍo. 「 Lᴀʀʀʏsʜᴇ̸ʀ 」

Capítulo 1. ꕤ*

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Ya han pasado un año seis meses desde que me mudé a Adisson Apartments, ya me he acostumbrado a los inquilinos extraños que están este edificio por que justamente ahora soy uno de ellos y no realmente hay que pensarlo mucho, muchas personas solo de verme usando una máscara extraña y escalofriante creen que soy un raro, aunque esto no tiene mucha de mi atención. 

Desde que me mudé conocí a un chico muy amable y amigable que en seguida se hizo mi amigo, hasta la fecha lo sigue siendo y lo considero mi mejor amigo, él también me considera su mejor amigo y eso me hace ser feliz. Es un largucho de cabello largo y castaño llamado Larry Jhonson, es tan alto que cuando estoy a su lado parezco un parásito del tamaño de una partícula. Este hombre es el mejor que he conocido en toda mi maldita vida, no es por ser muy gay pero me atrevo a decir que sin él todo sería un desorden; pero Larry no es el único amigo que tengo, también están el buen Todd Morrison y la atenta Ashley Campbell, los cuatro somos bastante unidos, tanto que los tres dementes que acabo de mencionar han visto mi rostro detrás que la prótesis facial que uso cotidianamente, aunque a pesar de las cicatrices y marcas que tengo en el rostro Ash cree que soy lindo y tierno. . . pero quizás solo tenga problemas de vista, problemas de vista bastante graves.

Afortunadamente apenas comenzamos con el maravilloso pero caluroso verano, las fechas de exámenes fueron terriblemente asquerosas, tuve que buscar libros decentes por toda la ciudad para poder estudiar, todo fue una completa mierda pero todo ahora está bien, mis calificaciones fueron decentes y ahora tengo planeado vivir muchas cosas locas este verano.

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Todo es muy cotidiano y apenas van dos días de vacaciones. Me despierto, desayuno con mi padre, a pesar de estar de vacaciones trabaja algunas horas usando la computadora oincluso no está en toda la mañana, solo dos días a la semana desayunamos juntos. Mientras él está ocupado suelo bajar al sótano del edificio para encontrarme con Larry y así hablar de cualquier bobada que se nos venga a la cabeza. Cuando Lisa, la madre de Larry, tiene algo de tiempo libre nos preparaba algún bocadillo, mi verano está yendo bastante bien y espero que así de bien lo termine.

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Estaba tranquilamente dormido, tanto que desperté a las doce y media de la tarde, estaba tan sumergido en mi sueño que no escuché el "pip" de mi reloj despertador. El pequeño y curioso Gizmo, mi gato, se escabulló entre mis sábanas para luego deslizar su húmeda lengua sobre las cicatrices en mi mejilla derecha haciéndome despertar, lo primero que vi al abrir mis parpados fue el rostro de Gizmo al lado mío.

- Buenos días, Gizmo.

Saludé a mi pequeño Gizmo, después dirigí la mirada a mi reloj despertador para percatarme de lo tarde que era.

- Buenas tardes, Gizmo.

Corregí mi saludo rápidamente en un tono divertido pues no me preocupaba la hora ni en lo más mínimo debido a que no tenía que asistir a la escuela, era tan maravilloso que aún no me lo creía. Estaba emocionado. Retiré las sábanas de un solo movimiento, al hacerlo recordé que me había ido a dormir en ropa interior, y es que estaba tan contento que ni siquiera me puse el pantalón holgado y la camiseta blanca que usaba por pijama. Solo me puse de pie, miré el pequeño vaso con agua en la pequeña mesa junto a mi cama que se encontraba del lado derecho, este vaso de cristal albergaba mi prótesis ocular, mi ojo de vidrio, el cual coloqué en mi cuenca derecha con cuidado pero de una manera rápida, ya tenía practica en ponérmelo. Salí de mi habitación estando aún algo adormilado, era seguro que mi padre no estuviera en casa, todos los días de la semana sale desde temprano, a excepción de los sábados y los domingos, debido a su trabajo y regresa a casa por la tarde, yo no tengo ningún problema, al contrario, me siento más libre por que él no está para decirme "vístete antes de salir de tu habitación, Sal Fisher" así que puedo andar en ropa interior sin escuchar reproches o regaños, era tan genial. Además así puedo ir al sótano desde temprano a hablar con Larry y saludar a Lisa con el pretexto de que bajé por que en casa no había algo bueno para comer, justamente hablando de eso, era mi plan para hoy.