ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 3

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Después de todo lo que bailó y bebió la noche pasada, Joaquín sabía que tenía que aguantar el castigo que eso conlleva: la cruda.

El chico mantenía los ojos cerrados, pero ya había despertado. Su cabeza estaba punzando y sentía demasiada sed, pero había algo que le impedía levantarse de su cama. Le tomó unos cuantos segundos darse cuenta de que más que un dolor de cabeza por alguna “cruda” se sentía realmente mareado e inclusive algo adolorido. 

Lentamente abrió los ojos y pudo observar que no se encontraba en su recámara, ni en la de Emilio. Ni siquiera reconoció la habitación como la de Marco o alguno otro de sus amigos. Lo primero que pudo observar fue el techo completamente blanco, y al girarse vio las paredes blancas con toques azules. Además de su cama, en la habitación solo había un sillón y frente a este una televisión en la que se transmitía una película animada. Joaquín levanto lentamente su brazo y pudo ver como tenía una intravenosa conectada.

—¿Amor? —escuchó de pronto una voz que pudo identificar rápidamente como la de Emilio.

—¿Q-qué me pasó? —preguntó Joaquín.

Inmediatamente el chico corrió hacia él y lo abrazó teniendo cuidado de no lastimarlo, las lágrimas de Emilio comenzaron a salir rápidamente mientras repetía una y otra vez “Finalmente, finalmente has despertado”, después de ello el chico se separó de Joaquín sin pronunciar alguna otra palabra, y salió por la puerta llamando a un doctor de una forma escandalosa. Unos segundos después dicho doctor entró, en compañía de Emilio y de una señora que Joaquín no reconoció, pero que al verlo comenzó a llorar mientras abrazaba a Emilio y sonreía.

—Después de más de un año finalmente has despertado del coma, muchacho —dijo el doctor que llego al lugar.

La expresión de Joaquín fue completamente de sorpresa, ¿a qué se refería el doctor con el coma? ¿más de un año? Justamente anoche estaban tomando en un bar.

»—Oh, mierda —pensó Joaquín—. Creo que tuve un accidente cuando íbamos camino a la casa de Mon, ¿realmente he perdido más de un año de mi vida?

La señora volvió a sonreír y dejó de abrazar a Emilio para que él se quedara en la habitación mientras ella acompañaba al doctor para algo que él llamó “un papeleo”. Emilio sonreía enormemente mientras limpiaba las lágrimas de sus ojos al mismo tiempo que se volvía a colocar al lado de Joaquín.

—Estaba tan asustado, pensé que te perdería —dijo entre lágrimas mientras tomaba con ambas manos las de Joaquín—. Fue el peor año de toda mi vida.

—No puedo creer que he perdido más de un año de mi vida —Joaquín mantenía los ojos fijos en el techo—. ¿Qué paso después de salir del bar? 

—Bueno, el auto quedó boca abajo y tú parecías inconsciente, después de eso una chica nos auxilió y llamo a la ambulancia. Yo salí casi ileso, pero tú…

—¿Alguien más salió herido?

—El día del accidente solo íbamos tu y yo, amor, nadie más salió herido, no entiendo de que hablas.

Sin prestar atención a las últimas palabras, Joaquín continúo hablando.

—Bueno, al menos Mon, Marco, Tony y los demás están bien —Joaquín se calmó un poco.

Emilio soltó el agarre que tenía sobre su mano.

—Nuevamente esos nombres, creo que era con lo que estabas soñando durante estos últimos meses.

Joaquín frunció el ceño, realmente confundido.

—¿De qué hablas? 

—¿De qué hablas tú?

—De tu hermana Mon y de mis amigos, Marco y Tony… Ana…

—Joaquín… —Emilio se levantó y brevemente le dio la espalda a Joaquín mientras se daba la vuelta—. Tú sabes que yo no tengo hermanas, y no conocemos a nadie de nombre Marco, Ana o Tony, a menos que con Marco te refieras a Don Marco, el portero de nuestro edificio.

Joaquín comenzó a reír de forma nerviosa.

—Me estas jodiendo, ¿no? Es como el día que desapareciste y todos comenzaron a decirme “¿quién es Emilio?” y todo eso.

—Yo nunca he desaparecido, no sé de lo que hablas.

—Emilio, basta.

Emilio relamió su labio inferior y comenzó a hablar.

—Amor —volvió a tomar asiento junto a Joaquín—, cuando comenzaste a despertar estabas murmurando nombres, justo los que mencionaste, creo que fueron los que te acompañaron durante el proceso que estuviste en coma, no eras consiente de tu mundo alrededor y quizá por eso creaste una historia en tus sueños.

—Anahí volvió, ¿verdad? —preguntó Joaquín—. ¿Acaso Mon intentó borrarme la memoria de nuevo y todo salió tan mal que terminé aquí? 

—¿Quién es Anahí? 

—Emilio, no juegues conmigo, habló del vampiro que te estuvo persiguiendo por lo que pasó con sus padres… Espera, ¿fue Zach? ¿Realmente sí era el malo después de todo? —Joaquín intento sentarse, pero estaba un poco adolorido—. ¿Mató a algún brujo?

—Vampiros… magia… brujos… creo que realmente tuviste un sueño intenso, pero los vampiros no existen, ni la magia ni nada de eso.

—Pero… —Joaquín volvió a hablar—. No… no pudo ser todo parte del coma… todo lo que vivimos…

—Amor —Emilio se aclaró la garganta—, hemos vivido tantas cosas juntos, ¿acaso no recuerdas que hace más de cuatro años nos hicimos novios?

Joaquín negó con la cabeza y parpadeó confundido, según el apenas iban para el año.

Emilio respiró profundamente y se acercó a darle un corto beso en la frente. —Hablaré con el doctor —dijo, y abandono la habitación, dejando a Joaquín sobre su camilla, realmente confundido.

Joaquín permaneció unos minutos esperando en su cuarto mientras Emilio volvía con el doctor.

¿Realmente había soñado todo esto?






Yo solo diré... ¿Teorías?

Aunque parezca, les aseguro que no es lo mismo que ya había pasado, solo esperen el desarrollo



- Con amor, Dul🍉

¿Quién es Joaquín? - [Emiliaco] RESUBIDA SIN EDITARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora