・⚘ ❛ First Act ❜ ⚘・

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Pronto será la graduación de mi último año de Instituto rumbo al inicio de la Universidad, yo junto con mis amigos hemos estado preparando un viaje especial para la graduación, mis padres casi se volvieron locos cuando les dije que iríamos a las Vegas Nevada, ellos no estuvieron muy de acuerdo al principio pero al final aceptaron y claro en parte ayudo que pronto se acercara mi cumpleaños número 18 para cuando el viaje se realizara yo ya habría cumplido la mayoría de edad, si bien no te consideraban un hombre hasta los 20, esa era la edad reglamentaria que necesitaba para viajar y poder tener acceso a los numerosos casinos que caracterizaban el lugar.

Desde lo acontecido hace ya casi trece años, no he celebrado ni un solo cumpleaños como se debe en mi vida, cada que se acercan estas fechas, todos los recuerdos de ese día vuelven. Cuando era pequeño lo que más detestaba eran las celebraciones y fiestas de cumpleaños por miedo a que hubieran payasos, la sola palabra en mi mente me provocaba escalofríos por todo el cuerpo. Lo que paso se hizo viral casi de inmediato, no desapareció de los medios por mucho tiempo, en las noticias, en el periódico, en internet, todos sacaban sus propias conspiraciones, era muy fácil hablar del tema siendo ajeno a él. Todo eso comenzó a afectarme bastante, a cualquier lado que fuera no dejaban de hablar de "Blin el payaso psicópata" así era ahora como lo apodaban y en el colegio todo era peor, los niños me molestaban cada vez que podían, me golpeaban y me insultaban, decían que era el culpable de todo y que tarde o temprano vendría por mí y me haría lo mismo que al gato de las piernas amputadas.

Finalmente mis padres decidieron que lo mejor era irnos del país, no solo por mi salud mental sino también por seguridad, esto jamás salió a la luz porque era información confidencial pero una noche un oficial de policía vino a hablar con mi padre, sus semblantes estaban llenos de preocupación y angustia, era un niño pequeño pero sabía que algo andaba mal, así que a hurtadillas me escabullí debajo del escritorio de mi padre dentro de su oficina y escuche toda su conversación.

—Estas seguro Young Mi no te parece un poco excesivo.

—Escúchame muy bien Seong Jin no estoy bromeando con esto, lo mejor es que tú y toda tu familia se vayan lo más pronto posible de Seúl.

—¿Acaso es tan grave el asunto?.

El hombre se quedó en silencio unos segundos, no podía ver su expresión pero se le escuchaba bastante preocupado y nervioso, finalmente lo oí suspirar y volver a tomar la palabra.

—El payaso que contrataste es uno de los criminales más buscados en todo el país, le habíamos perdido el rastro hasta este incidente, no dudaría que el planeara asesinarte a ti y a toda tu familia ¿Te imaginas si secuestrara al pequeño Kai? Es solo un niño y ese tipo es un psicópata.

—No vuelvas siquiera a plantearte esa posibilidad. —El oír mi nombre junto con el golpe que papa dio en la mesa y retumbo en todo el escritorio me habían asustado bastante, no quería ni siquiera imaginar que el pudiera volver y lastimarnos.

—Lo siento pero pensar en lo peor es lo que hacen los oficiales de policía y eso no es todo se pone peor, tiene a todo un sequito secundándolo...Dios fue tan hábil nadie sospecharía de un puto payaso.

Otro silencio crepuscular inundo toda la habitación nuevamente.

—En fin yo ya te he advertido pero la decisión es tuya...

Después de eso, el sujeto se marchó sin decir nada más, unos días más tarde mis padres y yo abordamos un avión cuyo destino era a Orlando Florida, quizás lo mejor hubiera sido nunca haber escuchado esa conversación, los niños son más felices porque no son conscientes de todos los problemas a su alrededor y yo con 5 años cargaba un gran peso sobre mis hombros, no sabía las razones ni él porque un asesino serial me tenía a mí y a toda mi familia en la mira.

Me costó adaptarme a un nuevo país, a un nuevo idioma, a una nueva cultura, perdí casi un año y medio, estudiando en una escuela particular de inglés y perfeccionando el idioma, mis padres me ayudaban en lo que se me dificultaba y pude seguir con total normalidad los futuros años escolares, poco a poco me fui adaptando y dejando de lado el pasado que tanto me atormentaba pensar en él, fueron años difíciles, era muy complicado socializar sintiéndome todo el tiempo inseguro y observado pero con ayuda del amor y compresión de mis padres y la ayuda profesional de una psicóloga pude sobrellevarlo bastante bien.

Por fin la tranquilidad llego a mi vida cuando en las noticias se reportaba que el famoso Dae Hyun Jung finalmente había sido atrapado después de varios años de búsqueda, ese era el verdadero nombre de "Blin", la policía dio con el gracias al secuestro de una chica la cual desafortunadamente no había salido con vida después de una serie de torturas constantes por parte del asesino, si bien esa noticia me había traído la paz que necesitaba también revivió todo lo que tanto me había esforzado por olvidar...

Después de escuchar esa noticia, mis padres se plantearon el volver a nuestro lugar de origen, yo no quería, no quería volver, con mucho trabajo había logrado enterrar el pasado y ahora todo lo ocurrido estaba volviendo, si en un país extranjero no me sentía seguro, mucho menos en el mismo sitio donde se encontraba ese criminal.

Mis inquietudes se las comente a mis padres, no entendía porque teníamos que volver si ya teníamos una vida hecha aquí, en ese entonces yo ya tenía 15, llevaba 10 años de mi vida viviendo en Estados Unidos, casi no recordaba nada de mis primeros años de vida más que el incidente que nos hizo irnos en primer lugar.

Mi mama trato de explicarme que tarde o temprano tendría que enfrentar mis miedos, no podíamos vivir toda la vida huyendo y si se había presentado la oportunidad de poder volver a Corea lo haríamos.

Yo estaba muy enojado, no podía creer que mis padres me estuvieran haciendo esto, que me obligaran a regresar si no quería, mi única y mejor amiga Lea ayudo a convencerme, prácticamente dijo lo mismo que mis padres; "uno no puede vivir con miedo, el miedo es un sentimiento silencioso que te va atrapando y en cuanto lograra superarlo me sentiría mejor conmigo mismo".

Marcharnos de ese lugar, en el que tanto tiempo me había sentido resguardado y protegido, iba a ser el primer paso para enfrentarme de una vez por todas a aquello que tanto me asustaba, no podía vivir como lo había hecho hasta ahora, vivir asustado no es vida.

Irnos de Florida fue la mejor decisión que pude haber tomado, no solo me volví más seguro también conocí a cuatro tontos y locos chicos los cuales se habían convertido en mis mejores amigos, por fin sentía que encajaba, por fin sentía que estaba donde debía de estar, me encontraba en un punto de mi vida donde sentía que el mundo estaba a mis pies.

Y ese viaje se convertiría en uno de los mejores momentos de mi vida, al menos de una cosa estaba seguro y era que sin duda seria inolvidable...     

El motel de los payasosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora