GEMELOS MIN [Terminada]

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Al día siguiente Jimin se encontraba caminando hasta su trabajo, de recepcionista, como de costumbre.

–Hola Jimin, ¿Cómo estás?–pregunto uno de los gemelos.

–Hola... Humm... Bien y ¿Tu?–dijo Jimin, en realidad no sabía quién era, si Xiumin o JiYong.

–Muy bien.... Recuerda que soy JiYong...–hablo el Omega contrario al darse cuenta de que Jimin ni supo distinguirlo.

–Oh, si.... Me alegra que estés bien Hyung...–dijo Jimin con un notable sonrojo.

–Si, me dijo el jefe Min que cuando llegarás que subieras a su oficina... Te está esperando.–hablo el Omega.

–Si, bueno... Iré a su oficina... Nos vemos en un rato hyung...–hablo Jimin y se subió por las escaleras para llegar a la oficina del jefe.

Entrando al lugar, Jimin sintió el aroma demasiado fuerte del alfa.

–¿Hyung? –pregunto Jimin algo nervioso.

Su Hyung no estaba... Viendo por todo el lugar, se percató de que había una nueva puerta, si, una nueva por qué Jimin no la había visto las veces que entraba. Cada que entraba solo se concentraba en su Hyung. En su voz, en su rostro, sus ojos negros como la noche y en su piel, esa piel lechosa, parecía de porcelana, quería tocarla cuando la tuviera cerca, quería saber si esa piel era igual de tersa como se veía de lejos. Esa piel que quería ver en...

–¡Jimin!– una voz hizo que parará sus pensamientos, que regresara al mundo.

Jimin dio un saltito del susto al escuchar tal voz.

–¿Si? ¿Pasa algo hyung?

–Estuve hablándote desde que salí del baño, ¿Por qué no contestabas?

–¿Baño?... No, Perdón hyung... Es que me perdí pensando....–Dijo Jimin algo avergonzado.

–Bueno, como sea... Toma asiento....–dijo el alfa caminando para la silla giratoria de cuero que estaba detrás de su escritorio.

Jimin se sentó en una de las sillas de plástico que estaban enfrente esperando paciente lo que su Hyung le diría.

–¿Que sucede Hyung?

–¿Recuerdas que te dije que te haría un nuevo contrato para tu nuevo trabajo?

–Oh... Cierto...–a Jimin le brillaron los ojos al recordarlo.

–Bueno, la noche anterior estuve haciendo el contrato y bueno, aquí está. Quiero explicarte para que entiendas un poco de cómo será....

–Bueno... Lo escucho señor...–dijo Jimin recibiendo una mala mirada por parte de el mayor.

–No me digas señor, que me siento viejo... Pero bueno, te explico. Consiste en que solo trabajarás de noche, como uno de los bailarines, la paga será buena, incluso mejor que la que tenías con los dos empleos.–hablo viendo los papeles. Como si los leyera.

–¿Solo será eso?

–Si, solo eso y bueno, el turno será el que tenías de mesero. La paga será incluso mejor, será todos los días, tu descanso serán las mañanas y un día entre semana, ese lo puedes elegir tu.

–En realidad aún no creo querer un descanso...

–Bueno entonces luego vemos eso, cuando tú creas conveniente. Así que, entonces... ¿Tenemos un contrato?