Las coinsidensias de mi vida [Sinb x Jhope]

Cap 4: Y más años

(7 años después)

- Ok cariño -dije al teléfono mientras conducía.

- Aish, odio que te vayas de viaje de negocios -dijo ella a través de la otra línea de forma tierna.

- Y yo odio que le sigas llamandolo así -dijo Tae desde la otra línea fastidiado a la pequeña Minjoo.

- Ay, tu ignoralo tío, solo esta celoso -dijo con una pequeña risa.

- Claro que sí Minjoo -reí un poco.

- ¡Claro que no! -reprochó Tae.

- ¡Claro que sí! -le dijeron fuertemente Yerin, Jiwoo, y los mellizos Wooseok y Yohan.

Reí ante la divertida situación que se libraba en casa de mi hermana, esa familia si que es muy divertida.

- Bueno, voy a colgar, nos vemos en dos meses -

- Bye amor -dijo despidiéndose con dulzura, y antes de colgar la llamada pude escuchar un bufido de Tae, lo cual me dio bastante
risa.

Había llegado a Cheongju a firmar un contrato de inversión, en realidad se lo habian pedido a Tae, pero se enteró que iba a estar fuera de casa durante dos meses, lo cual interfería con sus planes para su aniversario de bodas que era durante ese tiempo, así que me ofrecí a ir en su lugar, lo sé, soy el mejor cuñado que Tae podría desear.

Me estacioné junto a una escuela para poder revisar bien la dirección del hotel en el que me quedaría, hasta que repentinamente...

¡Pam! ¡pam!

Se oyeron dos fuertes golpes sobre el techo de mi camioneta, lo cual lo abolló un poco, no voy a negar a casi doy un grito, ¡pero es que me sorprendió!

Iba a salir a revisar que habían sido esos ruidos, pero de inmediato bajaron dos niñas de ahí arriba, no se veían con mas de 12 años, ambas rieron un poco volteando a ver a la escuela, se notaban que eran estudiantes de ahí ya que cargaban un uniforme escolar con la insignia de esta.

- ¡Hey! -les grité desde el auto con cierta molestia, osea, abollaron mi camioneta.

Ambas de inmediato me miraron sorprendidas y asustadas, cuando empecé a abrir la puerta para salir, en cambio, éstas dos arrancaron a correr.

- ¡Oigan! ¡vuelvan aquí, pequeñas bandalas! -les grité a ambas mientras las perseguia.

No corrí demasiado cuando pude atrapar a la mas alta de las dos, pero a la otra si no la pude alcanzar.

- ¡Ryujin! ¡ayuda! -gritó la jovencita que atrapé por el brazo, pero la otra no hizo caso y solo siguió corriendo- ¡suelteme! -forsejeó inútilmente ya que yo tenia mas fuerza.

- ¡Quedate quieta! ¡pequeña bandida! ¡tu pagaras por lo de mi auto! -dije molesto.

- ¡Yo no pagaré nada! ¡si no me suelta, diré que es un pervertido que me quiere secuestrar! -seguia forsejeando hasta que me miró a la cara y casi de inmediato dejó de luchar.

Extraño.

Me miró detenidamente unos segundos antes de hablar nuevamente, diciendo algo que desconsertaria a cualquiera...

- ¿Papá Hoseok? -preguntó entreserrando sus ojos un poco mientras aún me analizaba.

La solté de inmediato al oir su pregunta, ¿como esta niña sabia mi nombre? ¿y por qué "papá" Hoseok? Solo hay una persona que me dicia así... Espera un segundo... No puede ser... O sí?

- ¡Papá Hoseok! -dijo ahora muy contenta y dándome un fuerte y sorpresivo abrazo.

- ¿Ye-yeji? -pregunté aún sin creerlo, ¿en verdad es ella? Espera ¡de verdad es ella!- ¡Yeji! -correspondí a su abrazó muy contento e igual de fuerte, levantándola del suelo y dando vueltas con ella en brazos, para luego detenerme y separarla un poco y mirar la bien- Vaya, haz crecido mucho.