-Bien le mostraré su habitación cual será estará casi al fondo --¡wow! es un poco pequeño pero acogedor - Caminamos un gran pasillo, con un montón de habitaciones todo era blanco, el mío estaba hasta casi al fondo.
-Bueno señorita Lía hoy si me despido de usted al rato nos vemos -
-Esta bien, gracias Morgan digo Ryan -Sin decir más se va sólo haciente con las cabeza y se va.
Bien sin más decir me incorporó en la habitación que me a signaron debo de admitir que a pesar que se vea aterrador es bonita la habitación. Lo bueno de todo es que tengo mi baño propio así no tendré que salir a medía noche a ducharme eso sería aterrador, entró a la ducha salgo a decir verdad no me e tardado nada, voy a desempacar menos mal traje ropa sino que hubiera hecho me visto y peinó mi cabello para casi dormir, cuándo escuchó ruidos que provienen de a fuera que será, salgo para casi dormir, cuándo escuchó ruidos que provienen de a fuera que será, salgo a ver y no hay nadie todo está obscuro pero sólo está esa luz que proviene del cuarto, quien estará despierto a medía noche, sin más que hacer voy a pasó lento sin hacer ruido estoy a punto de entrar pero me arrepiento y siento que hay alguien detrás de mí.
-Aaaah Dios santo me asustaste! -
-Pero que demonios, que haces tú aquí? Y quien eres? -
-Me presentó soy la nueva doctora Lía Lewis, mucho gusto - levantó la mano para estrecharla con la suya.
-Soy la doctora Bianca Brown, pasa que hay dos colegas que quieren conocerte -
-Gracias -
-Chicas ella es la nueva colega es Lía Lewis -
-¡Hola! Soy Susan walker enfermera, es un gusto -
-Doctora Elizabeth Bell, es un placer trabajar juntas -
-Es un gusto poder conocerlas chicas, bueno creó que ya me tengo que ir disculpen no las quiero molestar - No iba a ser de metida
-No te preocupes, acompañanos es mejor más que poquitas -
-¡Muchas gracias! Si que ustedes son muy amables no esperaba que fueran así, me agradan - a decir verdad realmente me agradan estás chicas, Susan es de conflexión pequeña, blanca cómo el pan y cabello cómo la obscuridad, esos ojos carmesí muy bonitos, Elizabeth es todo lo contrarió es un poco alta, delgada de conflexión alta y cabello castaño su mirada cómo un gato por los ojos color verde, verde y no decir de Bianca Brown es de conflexión alta ojos color gris y cabello rubio pero algo reservada me caía bien.
-Ya conocerás a Marion es muy curiosa pero tiene un carácter, no la autoestimes que lo hará - Sin más que decir empezó a peinarse en el mini tocador mientras Susan y Elizabeth se pintaban las uñas.
-Hace cuánto tiempo trabajan aquí? - Me entró la curiosidad de saber.
-Bianca hace cinco años, Susan tres años y yo un año, y si lo preguntas el doctor Morgan hace cuatro años -
-no les causa intriga ese doctor? - De sólo escuchar su nombre me paraliza, se me paran los pelitos de punta.
-Pues claro que si, hay algo en el que no me trae buena espina - Dijo Bianca parándose del tocador
-Bueno chicas, ya hay que dormir mañana nos espera un día muy largo - Sacandonos a todas de su cuarto Elizabeth.
Todas nos despedimos y entramos a nuestros cuartos, estaba cansada por el viaje todavía tenía que desempacar pero no tenía las fuerzas suficientes para hacerlo ya mañana lo haría con menos prisa pero cómo sólo era una vez por semana que uno se quedaba supongo que no estaría mal que no desempacara. Estaba a punto de ir a acostarme cuándo volví a escuchar un ruido pero provenía de afuera, mi habitación tenía una ventana me levante a ver hacia la ventana sólo estaba acompañada la luna con su luz brillante que alumbraba toda una cuidad pero me detuve en seco cuándo en un árbol está ese hombre que me ponía los pelos de punta, se me quedó viendo con esa mirada tan maliciosa de repente una sonrisa apareció en su rostro rápidamente cerré la cortina con la que cubría la ventana y entré a la cama, estaba tan cansada que me quedé profundamente dormida.