Capítulo nueve: Dejarse llevar a veces no está mal

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HoSeok miró sus cartas con los ojos entrecerrados, pensativo, calculando su próximo movimiento entretanto escuchaba los suspiros  del pelinegro, quien le gritaba con la mirada que se diera prisa; pero HoSeok sólo le importaba pedir la carta correcta a la persona correcta, no apresurarse.

Tras varios segundos de duda y vacilación, levantó la vista de su manojo de cartas y le sonrió al mayor, quien arrugó el ceño al verle los bonitos hoyuelos sobresalirle de las mejillas

- Hyung - canturreó HoSeok, ensanchando su sonrisa característica aún más

El antes mencionado rodó los ojos
- ¿Qué?

La abuela Jojo, quien admiraba la escena enternecida, ocultó su sonrisa singular tras sus propiar cartas abanicadas. Estaba claro que ella no sería quién ganaría la ronda, pero le divertía ver a su nieto darle una paliza a su amigo de expresiones serias. Pero Min YoonGi era buen muchacho, de ello estaba segura la mayor

HoSeok subió sus cejas en un movimiento divertido, seguido de una mueca con los labios en un intento de hacer sonreír a su amigo, mas sin embargo, el de cabellos oscuros no daba su brazo a torcer; seguía con su expresión seria y huraña. HoSeok arrugó la naríz entendiendo que no haría sonreír nunca a su mayor, y sabía el por qué

- ¿Estás molesto porque te voy ganando, hyung? - inquirió, dedicándole una media sonrisa dulce

Min YoonGi miró hacia otro lado antes de responder
- No

- ¿Y por qué estás molesto entonces, hyung? - insistió HoSeok, ladeando su cabeza como lo hacía comúnmente

YoonGi pareció fruncir aún más el ceño antes de mirarle
- ¡Sólo apresúrate, HoSeok! - ordenó, volviendo a mirar a cualquier otra parte

La sonrisa de HoSeok se ensanchó por completo, y sus pómulos dejaron al descubierto sus hoyuelos de la suerte. Soltó una risa escandalosa que hizo sonrojar al pelinegro sin darse cuenta, y asintió

- En ese caso, - empezó a decir con su toque de euforia - Hyung, dame la k, por favor

El cuerpo del huraño se tensó, y obviando por completo el rosal que florecía en sus mejillas, le arrojó la carta de k de corazones de mala gana y ésta cayó sobre el regazo del menor, quien no aguantó para echarse a reír a todo pulmón otra vez

Había ganado la partida, y las otras cinco anteriores

HoSeok bajó sus cartas y las colocó en la alfombra a modo de abanico para que su abuela y amigo admirasen su jugada perfecta. Se levantó y empezó a hacer su baile de la victoria, sólo para presumirle al mayor lo bueno que era jugando cartas

- Oh, sí. Oh, sí. Volví a ganar - cantó entre movimientos indefinidos mientras su abuela se reía y Min YoonGi moría de vergüenza ajena - En tu cara, hyung

El rostro de Min YoonGi se iluminó un poco más, pero él parecía pretender que nadie estaba observándole, sin embargo, HoSeok adoraba en silencio y a escondidas el arrebol pintado en su piel blancuzca; como siempre. Tan bonito como el amanecer en el invierno

La nana Jojo luego de partirse de la risa, dejó sus cartas en la alfombra y se levantó

- Iré a preparar té - anunció - ¿Gustan una taza?

HoSeok se detuvo y le miró asintiendo
- Yo sí ¿Tú quieres té, hyung? - cuestionó, girándose para mirar al pelinegro quien ya no parecía estar tan avergonzado

YoonGi asintió, levantando la vista para observar a la mujer de cabellos canosos

- Gracias, abuela Jojo

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⏰ Última actualización: Sep 29, 2020 ⏰

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