"No me abraces, me das asco".
Naruto hizo puchero al ver a Sasuke llegando al punto de encuentro del equipo. Sólo habían pasado unos cuantos días desde que el chico había empezado a rehuir sus acercamientos amistosos y su pecho se sentía hundido y pisoteado. Mucho más cuando el día anterior Sasuke había rechazado su abrazo con aquellas palabras, no las había dicho molesto o enojado, sino más como resignado. Y aunque Sasuke realmente no hizo nada por quitarse el brazo del rubio de encima, Naruto quería poder abrazarse a él de nuevo sin oír ninguna queja.
Sabía que Sasuke lo hacía a propósito, lo había leído después de todo, pero aún así se sentía como un perrito pateado.
—De acuerdo chicos, ahora que están todos, podemos empezar —Kakashi inició —. La misión de hoy se trata de proteger al señor feudal y su casa mientras él va de viaje a la tierra de los arrozales. Para ello, uno de ustedes vendrá conmigo para escoltarlo y los otros dos se quedarán en la casa. Sakura, tú serás-
—Kakashi sensei —Sasuke interrumpió abruptamente —. Yo quiero ir con usted.
Kakashi pareció sorprendido. —De hecho, Sasuke, iba a pedir que te quedes con Naruto vigilando la casa. Sakura es la mejor designada ahora mismo para salir de la aldea.
—Si hay un ataque de ninjas enemigos, dos personas que puedan usar el chidori sería ventajoso.
—No se trata solamente de eso, Sak-
—Por favor, Kakashi sensei.
Aquella última frase sonó más como plegaria que sugerencia y Kakashi pareció aún más perplejo que antes, la carita angustiada de Sasuke pareció terminar de derrotarlo.
—De acuerdo, pero no te separarás del señor feudal, cualquier pelea me la dejarás a mí.
—Como usted diga.
Dicho esto, los cuatro empezaron el camino hacia la casa del señor feudal, Sakura adelante de ellos y Sasuke tratando de caminar junto a ella para sorpresa de la misma y de Kakashi también.
Naruto sólo los observó con un puchero. Vaya, Sasuke realmente no quería quedarse a solas con él, Sasuke realmente estaba haciendo lo posible por apartarlo. Tal vez tenía razón en hacerlo, tal vez era lo mejor para él porque después de todo Naruto tampoco quería darle falsas esperanzas y lastimarlo, eso sería cruel.
Pero entonces, ¿por qué le dolía no estar cerca de Sasuke? ¿Por qué quería seguir tratando de llegar a él y hacerlo bajar sus murallas? No lo hacía por crueldad o simple curiosidad, jamás haría eso. Sin embargo... no sabría explicar por qué tenía tanta necesidad de mostrarle afecto, de abrazarlo, hacerlo sonreír, de llenarlo de be-
—Naruto —Kakashi llamó su atención, dejando que los otros dos se adelanten un poco más —. Acerca de lo que me platicaste ese día, ¿cómo te fue?
—¿Uh?
—Ya sabes, lo del diario y esa persona que está locamente enamorada de ti o algo así.
—Oh... —Naruto bajó la mirada —. Creo que ni aún leyendo su diario sé cómo acercarme bien a esa persona, quiero que sepa que no le quiero lastimar, pero no sé cómo hacérselo saber.
Kakashi pareció pensativo. —Así que es eso, sólo tiene miedo —lo dijo casi en un susurro que Naruto apenas alcanzó a entender.
—O-Oiga ¿qué dijo? ¿A qué viene todo esto?
—¿Uhm? —Kakashi aclaró su garganta y le sonrió con su ojito —. Sólo curiosidad.
Al llegar a la casa del señor feudal, Kakashi pidió un momento para hacer una llamada y luego de ello le dió a Naruto y Sakura la lista de cosas de las que tener cuidado y les instruyó no salir de la casa. Sasuke partió junto a los dos adultos en silencio y evitando despedirse, volviendo a provocar un puchero de Naruto.
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El diario de animalitos de Sasuke
Fiksi Penggemar"¡Diario secreto de animalitos kawaii! Crea una cuenta y guarda todas tus notas de forma segura al lado de lindos stickers." Sasuke era un chico que ocultaba sus sentimientos demasiado bien y escondía sus "te amo" en sus "eres un tarado", pero tenía...