Regreso

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Era su tarde de entrenamiento, era una tarde de verano que hacía particularmente mucho calor. Decidió quitarse la camisa, así se sentiría mucho más libre al estar golpeando a sus nuevos subordinados, a modo de práctica claro.

Desde que se había graduado él ya no era más un subalterno de Minato. Era una persona de total confianza y manejaba algunas de las cuentas de la familia Namikaze y sin duda contaba con sus propios subalternos a los cuales mandaba a hacer los trabajos sucios.

Se había salido de la casa Namikaze y claro que compró la suya. Sin embargo, su nuevo hogar no estaba muy lejos de la de Minato, así podría estar cuidando de la familia como siempre lo había hecho.

Cuando por fin dejó a todos en el suelo, tomó un respiro y pidió sus alimentos. Mientras descansaba recibió un mensaje de Minato: "¿Puedes venir? Necesito mostrarte algo." Era fin de semana, normalmente usaba esos días para descansar y dedicarse a sí mismo, pero era evidente que no podía desacatar las peticiones de Minato, por más cansado que estuviera.

Trato de arreglarse lo más presentable que pudo y corrió hacia la casa de su jefe. Lo estaba esperando ya en el patio al interior de la casa como era de costumbre.

-Sus ordenes Minato-sama.

-Te tengo una sorpresa, pero primero siéntate y cuéntame. ¿Cómo te ha parecido tu nueva vida desde que estás al mando de unos cuántos subalternos? ¿Cómo se siente tener el poder desde hace 4 años, Sasuke? -El hombre estaba en su mesa de jardín bebiendo vino y con una tabla de quesos.

-Tal y como siempre me lo describió. Emocionante pero al mismo tiempo bastante estresante. Solo tengo que terminar de entrenarlos de lo contrario no duraría ni una hora aquí.

-Como Naruto ¿recuerdas? Él fue tu primer estudiante. ¿Cómo viste su progreso?

-Muy impresionante...para ser solo un niño -sonrió al recordar esos años.

-Me alegra que estés teniendo más control en mis negocios. Algún día me jubilaré y dejaré todo esto en tus manos y en las de mi hijo. Que por cierto, ¿Sabías que ya se graduó de la universidad y con honores?

-No, pero no es algo que me sorprenda. Siempre tuvo potencial solo debía dejar de ser tan distraído. Me da gusto por él.

En ese momento un par de disparos se escucharon en el jardín. Sasuke actuó de inmediato, sacó su arma y cubrió a su jefe.

-Quédese detrás de mi -trataba de buscar con la mirada quien había hecho tal estupidez de atacarlos en su propia casa. Aún así Minato no parecía preocupado- ¿Minato-sama?

-Que lento actuaste, de haber querido pude haber matado a mi padre. -La persona que había hablado había sido Naruto desde un balcón. Portaba una pistola blanca con detalles de oro. Al cruzar sus miradas ambos sonrieron y se invadieron de felicidad. -Debes mejorar en tus reflejos, ¿o es que ya eres demasiado viejo?

Sasuke solo sonrió, pero también divisó el jardín. Ahí mismo Minato contaba con maniquíes de tiro, su sorpresa fue tal, al ver que Naruto había disparado a todos justo en medio de los ojos.

-¿No me vas a dar mi abrazo de bienvenida? -Naruto por fin había bajado y estaba frente a él. Justo como lo recordaba, solo que un poco más grande y  se le notaba el gimnasio.

-No lo sé ya no eres un niño ¿No me vas a decir que ya estas grande para esas muestras de afecto?

-¡Yo siempre he sido afectuoso y lo sabes! -sin pensarlo abrazo muy fuerte a Sasuke y él respondió como pudo, pues lo tenía bien sujeto de con sus, ya enormes, brazos. -Te extrañe mucho, a ti a mi padre y a todos aquí.

El hijo del Hokage Donde viven las historias. Descúbrelo ahora