Golpe

1K 113 17
                                    

Antes de la llegada de Naruto, se suponía que Ino sería la siguiente al mando en el "negocio" de Minato pero estaba más que claro que ella no estaba para nada interesada en el asunto. Su sueño siempre fue ser bailarina por lo que la llegada de su hermano a la familia le facilitó mucho continuarlo.

Todos esos años Ino se había dedicado a perfeccionar el difícil arte de la danza. Quizás no fue muy fácil pero ella realmente amaba bailar y en esta ocasión le habían dado la oportunidad de ser la protagonista y no podía estar más feliz por ello.

Toda su familia la acompañaría ese día , todos menos su padre claro. No porque no lo deseara sino por causas del trabajo y al parecer se trataba de un asunto delicado por eso nadie lo cuestionó.

-Pero prométeme que irás cuando acabes el asunto padre. Este evento es muy importante para Ino y es importante que todos estemos ahí.

-Lo haré Naruto, solo es una cuestión delicada con un infiltrado.

-¿Tenemos un espía en casa?

-Silencio, no queremos que nadie sepa que estamos por descubrirlo. Por ahora lo mejor que podemos hacer es que ustedes se vayan y pretendas que no sabes nada. Eres un chico muy astuto.

-Solo cuídate mucho. -Le dio un abrazo y salió de la casa con su madrastra y su hermana.

-Señor, Hidan llegó. -Sasuke se acercó a Minato, tenía un mal presentimiento.

-Sasuke, prométeme que si algo me llegase a pasar, protegerás a mis hijos a toda costa cueste lo que cueste.

-No tengo necesidad de hacer esa promesa porque nada podría ocurrir.

Ambos hombres fueron al encuentro con Hidan, quien evidentemente ya estaba siendo detenido por los subalternos de Minato. Habían conseguido la información necesaria para saber que estaba trabajando para Mei y evidentemente ese hombre había estado entregando información a la mujer.

-No te queda mucho. ¿Dónde está Mei? -Minato se acercó al hombre y colocó su pistola sobre la frente de Hidan.

-No imaginé que podrían demorar tanto tiempo en descubrir a un infiltrado. ¿Qué van a hacer ahora? Matarme no detendrá lo que está por venir y sé que lo saben.

-Estamos listos y si lo dices con tanta confianza es porque vienen en camino. -disparó en seco.

No tenía sentido mantenerlo vivo todos los que trabajaban para otro Kage eran demasiado leales y morirían antes de decir algo.

-Sasuke, ordena a todos que alisten y que porten sus armas. Voy a defender mi casa a toda costa. Alerta al guardaespaldas que está con Naruto y que los lleve lejos hasta que acabe el recital de mi Ino.

-Entendido señor.

Minato llevó a sus propias tropas al frente de la casa. Debía proteger a toda costa su patrimonio, su posición de líder, a sus subordinados y sobretodo a su familia.

-Esa perra mal nacida no va a tomar lo que es mío.

Los Kages eran los líderes de las organizaciones criminales. Hace poco les llegó la información de que Mei se había convertido en Mizukage y estaba dispuesta a dar un golpe en contra de Minato pero eso no iba a pasar sin que el Hokage diera pelea.

El primer tiroteo ocurrió. Minato y Sasuke veían todo desde la azotea de la casa y ellos fungían como francotiradores. Mei contaba con un gran ejército y comenzaban a no darse abasto.

-Mierda. Sasuke, esto no es suficiente. Debemos bajar y apoyar a los demás. -hablo por su comunicador -¿Sarutobi? ¿Cuántas bajas?

-Toda el ala sur está acabada señor, nos superan en número. Creo que deberíamos... -y la comunicación se interfirió.

El hijo del Hokage Donde viven las historias. Descúbrelo ahora