Introducción

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De un lado a otro, meciéndose lentamente... un gancho se movía al compás del reloj, calmado, hipnotizante, paciente a que todo ocurra tal y como debe ser, cómo está predicho a que suceda

—Yone, mi amado Yone— se oye en susurro inaudible— ¿Mi amor no vas a venir?— pregunta y su sonrisa se ensancha más, las mejillas blancas se vuelven sonrosadas, como si escuchará una respuesta en el vacío salón y muy buena al parecer— Sé que vas a volver... Tu orgullo no es nada ante nuestro amor ¿Verdad?... Nos amamos mucho Yone, nadie importa... Ni un amante, ni una amistad, ni un familiar, solo nosotros... Mi amor... Te estoy esperando...— un inusual púrpura son de color sus ojos, entrecerrados anhelantes de verlo se mantienen fijos en la puerta, no quiere ver a sus sirvientes, solo lo quiere a él, a la única alma que ve digno de mantenerse al lado suyo, pues para él los demás son solos almas inútiles, vacías, que merecen encerrarse lejos de su vista, servir de adorno... Pero Yone, ohh su amado Yone... ¿Que no había hecho por él? O mejor dicho ¿Que cosa no haría por él? Tenerlo a su lado, amarlo hasta el amanecer, totalmente suyo y a su merced, sus meros pensamientos eran un paraíso, que felizmente no se alejaban de la realidad y eso lo podría afirmar sin objeciones— Estamos encadenados Yone, no podemos separarnos...

A lo último mira de reojo su teléfono que estaba en sus piernas y la dulce expresión desaparece, lo había bloqueado... Entonces su paranoia se refleja al pasar ese pensamiento por su cabeza, sus ojos se exaltan furiosos, Yone no podía irse lejos...

—Te amo tanto, tú lo sabes bien, siempre te lo digo— la voz dulce poco a poco se apaga, su mirada de enojo se relaja a una entristecida— siempre te lo he dicho, jamás podría amar a alguien que no fueras tú, ellos no son nada, solo juguetes para mí ¿Estas celoso de ellos? ¿Es por eso que siempre me reclamas? Yone, siempre seré tuyo, aunque no sea en cuerpo, lo soy en alma, eso es lo importante... Además puedes verlo como una relación joniense antigua, mientras el esposo haga feliz a su mujer, no importa si tiene amantes, porque lo que importa es la fidelidad de la mujer y el placer junto a la felicidad del hombre— esa era su relación, Yone debía ser suyo completamente... solo suyo, debía seguirlo fiel, como él lo haría para hacerlo feliz—


¿Capítulo 0?

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¿Capítulo 0?

Pos sí, es como una introducción de cómo sería el Thresh en este fanfic :3 (no se si ya se entiende como fue la relación de ambos, podrían ver un poco lo toxico, pero no sé preocupen que más adelante Yone lo explicará a detalle ;))))

Ya cuando actualicé se viene lo chido (~‾▿‾)~

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