P. E.

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//Recuerden que Jim es como los emperadores se referían a sí mismos. //

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"¿La hija de Jim, dices?"

Todo el mundo murmuraba en el evento inesperado. Viendo a la izquierda y a la derecha, podía ver a Heikel y al Duque Alfius también inclinándose como ella. Viéndolos a los dos, pudo calmarse rápidamente.

El emperador Claude no dijo una palabra por un momento. Jennet levantó elegantemente su cabeza como le enseñaron.

Sabía que moverse sin permiso estaba prohibido pero era debido a su curiosidad por saber cómo era su padre.

Sus ojos se encontraron con la gema azul como ojos que brillan bajo la lámpara. Afortunadamente Claude no se enfadó. En cambio, parecía haber sentido interés por sus entrañas.

Ah, así que este es mi padre. Pensando esto, Jennet se conmovió.

En ese momento, la mirada del emperador se dirigió a la espalda de Jennet. Jennet se movió para ver su espalda también y se sorprendió.

Era porque una chica pálida y frágil que podía desmayarse en cualquier momento estaba allí. La chica estaba temblando. Era muy hermosa si la ves de cerca, pero pensó que era una hermosa flor que se marchitaba.

Jennet pronto se dio cuenta de que era la princesa Athanasia, su hermanastra.

"Interesante".

La voz del emperador hizo que Jennet se diera la vuelta.

"Escucharé la historia completa en la sala de trabajo. Debería irme ahora."

Claude, que miraba a los nobles de la debutante con cara y postura aburridas, por primera vez, sonrió débilmente.

Nadie se atrevió a decir una palabra sobre ello, así que se inclinaron hasta que se fue. Y después de que el emperador se fue por completo, se volvió muy ruidoso.

"Endereza más tu espalda".

Jennet suspiró aliviada pero volvió la cabeza hacia el duque Alfius.

"No importa lo que digan, la heroína de esta fiesta eres tú, princesa Jennet".

El duque Alfius, que la crió como su verdadera hija, ahora le hablaba formalmente. Era incómodo, pero ella sabía que no había otra opción.

"Manos por favor."

Heikel, que estaba a su lado, extendió su mano. Jennet inhaló antes de tomar la mano frente a ella.

Todo el mundo vio a los tres caminar hacia el salón.

Entonces ella vio a la princesa Athanasia. Parecía débil y deprimida. Jennet oyó a los nobles susurrar que no tenía escolta, ni siquiera de su padre, y que nadie bailaría con ella.

Jennet, que brillaba hoy y era amada por su familia, estaba preocupada por su hermanastra, que se veía avergonzada y frágil. Pero no había nada que pudiera hacer por ella todavía.

Jennet dio un paso más cerca de donde se suponía que debía estar parada ahora.

-『Princesa Encantadora』Volumen 2- La mejor debutante 中-

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"Un paso a la derecha".

Un día tan soleado y claro, la niña de 13 años... Estaba bailando muy bien sin la música.

"Ahora gira dos veces en ese lugar. ¡Muy bien!"

No era una cosa normal, pero después de hacerlo 100, 1000 veces, me acostumbré. Wahahah. ¡Esto es lo que se llama una victoria humana!