Shigatsu Wa Kimi No Uso: 10 Años Después

10 Años Después/One-Shot

Kousei Arima, es un joven pianista de nivel mundial de solo 24 años, el cual la vida le dió duros golpes, el perdió a las dos personas que mas amaba en su vida, su madre y Kaori Miyazono, aquella chica que le devolvió los colores y le permitió volver a tocar el piano. Hoy se cumplen 10 años desde la muerte del primer amor del pianista, un día frío de invierno. El pelinegro de lentes visitaba con regularidad la tumba de Kaori, le dejaba flores o canelés que compraba en la panadería de la familia Miyazono.
Desde la primavera en que la rubia violinista se fue, el no dejó de practicar, fue a una preparatoria para músicos junto a Takeshi Aiza y Emi Igawa, creando un profundo lazo de amistad con ambos músicos. No perdió su amistad con Tsubaki y Watari, ellos se siguieron viendo a pesar de la distancia. También se siguió viendo con Nagi, Seto y su hija, les tenía mucho aprecio. Año tras año empezó a viajar por el mundo, participando en concursos y tocando melodías para películas y series, el antiguo "metrónomo humamo" ahora era conocido como un pianista muy sentimental, en todos sus concursos, por alguna extraña razón, los presentes terminaban llorando al final de la muestra.
En este momento, Kousei estaba en su casa, precisamente en el cuarto de música tocando una creación propia de el.

Inserte Shigatsu Wa Kimi No Uso OST: "Watashi No Uso"

Kousei: (Pasaron diez años, diez años desde que te fuiste) -pensaba tocando esas teclas recordando a Kaori- (Nunca te dije lo que sentía, y te fuiste sin que pudiera decírtelo... a veces me pregunto si lo sabías antes de escribir la carta) -miró el llamado "tesoro", la foto de Kaori y Kousei de niños- (Me duele tu ausencia, incluso después de tanto tiempo, no me basta con tenerte en mi corazón, te quiero aquí, conmigo) -lágrimas empezaron a caer- (A pesar de tu ausencia, seguí con mi vida de cierta manera, continué tocando el piano... también me hice mas cercano a Tsubaki, poco a poco empezé a verla como una mujer) -lentamente terminó de tocar la música- ¿Qué es lo que siento por Tsubaki? -preguntó al aire acariciando con sus dedos la fotografía sobre el piano- (¿Yo la amo?)

Twinkle twinkle little star...

¿Te suicidarías conmigo?

Mírame a mí, si bajas la mirada... estarás encerrado en la jaula de la partitura.

¿Pude entrar en tu corazón?

¡Tengo miedo!

Tan efímera y débil. Pero brilla con todo su esplendor. Pum, pum, como un palpitar del corazón. Así es la luz de la vida.

Mozart nos dice desde el cielo… “Emprende una aventura”.

¿Pude entrar en tu corazón?

No presiones el botón de reinicio...

Arima Kousei... ¡Te amo, te amo, te amo!

No me olvides, ¿sí? Es una promesa.

Esos y montones de recuerdos atravesaban el corazón de Kousei, haciéndolo llorar de dolor y pena. Esto se repetía todos los años en el aniversario de la muerte de Kaori Miyazono. Después de un rato decidió salir de la sala y caminar un poco para despejarse, pero se encontró con cierta chica castaña...

Tsubaki: ¿Aún te acuerdas que existo, idiota? -cuestionó claramente molesta apareciendo frente al pelinegro-

Kousei: Tsubaki... hola -saludó neutral- Estuve algo ocupado estos días, lamento no haberte llamado