El camino se ve observado por unos ojos curiosos, son parecidos a los de su mellizo. Su cabeza daba mil vueltas, la salud de su padre es considerablemente inestable
Aunque se ha puesto peor con el tiempo. Tiene una a escapatoria, algo de creatividad para alentar su volátil imaginación, solía imaginar estar en el mar, viajando por la arena a donde el viento la lleve. Casi podía sentir el viento sobre su cabello, respirar el agua salada y sentir sobre sus hombros ¿una mano?
—despierta Corinne, ya llegamos -dijo su hermano, Gilbert. Ayudaron a su padre, y por fin, llegaron a casa —no es asombroso el dulce aroma a hogar —dijo Corinne en voz alta, y se hecho a su cama, dando un pequeño rebote. Adoraba su cama, sus fantasías se volvían realidad ahí
—preparare algo —dijo Gilbert desde la cocina, la comida de Gilbert, bueno, es comestible. Nadie nunca prometió un sabor agradable, pero, es comestible —yo te ayudó —dijo Corinne, a lo que se quería referir, sería más parecido a un; aparte, yo lo hago
Nadie le enseño, pues su madre murió el día en el que nació. Ella nació sin complicación alguna, Gilbert, por otro lado, nació volteado. Ahí su madre no pudo más
Preparó una sopa, y entre Gilbert y ella, se la dieron de comer a su padre —mañana van a ir a la escuela —la afirmación de su padre, es eso, una orden, no una sugerencia —no podemos dejarte solo —respondió Corinne, le incomodaba ir a la escuela. No por no saber, o que no le gusta aprender. Su problema tiene nombre y apellido: Ruby Gillis
Siempre le preguntaba por su hermano, y decía que era su hermana de familia, cosa que molestaba un poco a Corinne, pero igual le daba gracia —encontraremos la solución —dijo su padre —la señora Kincannon puede quedarse contigo, le pagaríamos —mencionó Gilbert
Y así, fue a dormir. Al día siguiente despertó muy temprano —Gilbert, tenemos que ir —se prepararon y corrieron hasta la casa se la señora Kincannon, no le importaba mucho el hecho si debería correr o no. Era una emergencia
La señora Kincannon aceptó, y fueron hasta la escuela —mis padres dicen que fue una calumnia —escucharon a lo lejos —¿qué fue eso? —pregunto Gilbert —no lo se Gilbert, no soy una adivina
—¿te gustaría que te calumniaran? —Billy Andrews, esta haciéndole algo a esa chica —Corinne, quédate aquí —dijo Gilbert, cosa que molesto a Corinne, pues, que sea mujer no significa que no pueda darle una paliza a ese bravucón —te daré una lección firulais. Eres una perra mala
—una perra malvada
—Oye Billy—¿Cómo te va? —Gilbert se acercaba a Billy y a la chica. Corinne quería ir, y meterle un puñetazo en la nariz. Y sabía que Gilbert no lo haría —hola Gilbert, Corinne
—¡vaya! Que gusto haber regresado -dijo Gilbert, el cual noto el enojo de su hermana y la sostuvo de la muñeca —si —Billy no sabía cómo reaccionar —si, bienvenidos
—si, que gusto verte amigo —habló Gilbert —¿estaban jugando a algo? —Corinne vio a la niña nueva. Tenía ropas cafés y en tonos muy neutros, pero un hermoso cabello rojizo que caía en dos largas trenzas —parece divertido, pero probablemente deberíamos ir a la escuela
—odio llegar tarde. El señor Phillips seguro se enojada —intervino por primera vez Corinne —si, estaba a punto de irme. Nos vemos allá —Billy se fue, y Gilbert soltó la muñeca de su hermana —¿esta bien, señorita? —pregunto Gilbert, a lo que Corinne puso los ojos en blanco —debo irme
—de nada —dijo Corinne irónica —¿algo más? ¿Algún dragón que haya que matar? —contestó Gilbert —no, gracias
—¿quién eres? —pregunto Corinne —oye ¿quién eres? —Gilbert alzó un poco la voz. Empezaron a correr detrás de la pelirroja chica —yo me adelanto
Corinne llegó hasta la escuela —¡Corinne! —sus amigas fueron a saludar —Ann* esta hablando con Gilbert —Corinne vio a la pelirroja, también a sus amigas enojadas, a Ruby llorando y a Diana tratamiento de calmar la situación
Corinne no lo entendía, ¿se ponían así por un chico? Gilbert entró y sus amigas —Tillie, Josie, Diana y Ruby —la jalaron hasta la chica nueva —¿Qué crees que hacías caminando con Gilbert Blythe? —dijo con enojo y repulsión Josie, ciertamente le tenía un odio a la chica —yo... —Ann intento defenderse, pero fue callada por Tillie —no puedes hablar con Gilbert Blythe. Ni siquiera mirarlo, velo por ti misma
Josie abrazo a Ruby, quien lloraba desconsolada, Corinne rodo los ojos, deseaba ser un muchacho, ellos no tenían esos problemas tan ridículos —hace tres años que le gusta a Ruby. Ella lo vio primero
—nadie lo vio primero, porque Gilbert no es un objeto, el no le pertenece a nadie. Y tampoco le pueden prohibir a alguien verlo o hablarle si les gusta, eso aplica para todos —dijo Corinne —¿Corinne? Disculpa, pero que actúes como un muchacho y te comportes como uno, no significa que vas a pensar como uno —Josie siguió consolando a Ruby —calma, esas chicas horribles no sabían nada
Corinne vio a Ann, ambas compartieron unas miradas incómodas —igual que ayer, con esos cuentos tuyos —Josie era el mar de veneno en esta conversación —lo siento, no era mi intención. Solo paso
—pues que no vuelva a pasar
—no. Lo prometo, no quiero nada de elRuby, Josie y Tillie se fueron —yo lo arreglare —dijo Diana dejándolas sola —supongo que esa presentación no fue muy alentadora —dijo Corinne a lo que hizo reír a las dos muchachas —me llamó Corinne, pero dime Cori
—me llamó Ann, Ann con una e
—bueno, Anne con una e, te invitó a pasarCorinne le extendió el brazo a Anne, como su de un chico se tratara —muy amable de su parte joven Cori —Anne aceptó, ambas entraron a la escuela entre risas
*la autora, en inglés, escribía Ann, antes de que Anne dijera que su nombre se escribía con "e"
No me voy a meter tanto en la primera temporada, solo lo importante
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coeur brisé - Jerry Baynard
Fanficcuando Anne llegó a Avonlea, con la sorpresa de que era una niña y no un niño, los Cuthbert se miraron obligados a contratar a un chico francés para ayudarle a Matthew, Anne después de muchos altibajos hizo grandes amigas: Diana Barry Ruby Gillis Ja...