Hoy es martes, el cielo esta despejado, la luz del sol pega a mi ventana. Hoy es otro día más en el orfanato donde vivo temporalmente (hasta que eventualmente cumpla 18 años), tengo 17, significa que me faltan 3 meses y 18 días para salir de aquí y ser independiente completamente.
Mi nombre es Elizabeth, desde pequeña siempre he tenido la fascinación por los libros, las bellas artes y por crear un mundo donde el plástico de nuestro planeta disminuya. Por eso último, desde que tengo 13 años, y con ayuda de maestros que creyeron en mí, empecé a diseñar productos de impacto ambiental. Con el largo de estos 4 años, y con mis dotados conocimientos, he podido llegar a ser una empresaria a mis 17 años. Claro, tengo que cuidarme que el orfanato no que quite mi dinero, ya que ellos se encargan de mí por ahora, por eso aún soy bastante anónima con mi nombre y con quién tengo de cliente. Si, ya se que pensarás que una chica de 17 años no puede tener tantos conocimientos financieros y de innovación y creatividad, pero créanme que desde temprana edad he podido entender muchas cosas con los libros, al final, los libros fueron mis amigos en toda mi niñez, pero esa es otra historia para otra ocasión.
Hoy tengo una reunión con otros empresarios que también se dedican a la fabricación de productos de belleza y cuidado de la salud. Mi secretario Kim, él es coreano, que por suerte hace dos años nos encontramos en un momento de necesidad de apoyo, y que al final se ha convertido en una persona especial y sumamente trabajador y leal a mi lado. En fin, los dos iremos a esa reunión.
Cuando terminé mis clases de preparatoria, que por cierto mi carrera técnica es de Comercio Internacional, me regresé rápido al orfanato para ponerme algo más decente, como también soy hábil en la maquina para cocer, hace días me hice una blazer y un pantalón de color azul marino, bastante formal creo yo para la ocasión.
Investigué desde que me enviaron la invitación para ir a esa reunión, sobre las personas que iban a ir, era gente muy preparada, con un nivel educativo alto y obviamente con varios billetes en el bolsillo. Yo quería conocerlos, que invirtieran en mi pequeña empresa que iba creciendo rápidamente con productos de belleza sustentable y libres de plástico, esperando ser una gran empresaria en pocos años.
Mi secretario vino por mí a las 7 pm, le dije que esperara en la esquina, pues no quiero tener problemas con el orfanato por salir tarde. Así que me escapé sin que nadie me viera, y me encontré con el secretario Kim.
-Se ve muy bien señorita Elizabeth
-Gracias, secretario Kim. Bueno, vámonos que no quiero llegar tarde a esa reunión.
Nos fuimos en el auto del secretario Kim, era una camionera negra y bastante grande, pues tenía dos hijos y uno en camino.
Cuando estábamos a punto de llegar, vi un edificio enorme enfrente de mí, Con ventanales que cubrían todo el edificio, con unas letras blancas arriba que decían "Genomma Lab".
.....................................................................................................................................Quiero aclarar dos cosas:
La primera: esta es mi primera historia que hago, por ello me gustaría que dejen sus comentarios de que les parece o que no les parece, con honestidad y respeto.
Segundo: En la historia, Rodrigo y Elizabeth se llevan 20 años, por lo tanto Elizabeth en este momento tiene 17 años y Rodrigo 37.
Espero les guste mucho, los adoro a cada uno que se está tomando el momento de leer mi historia. <3
Recuerden, todo es ficción, se vale soñar pero sin olvidarnos de la realidad. <3
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Un triste amor
FanfictionElizabeth, una chica joven y con muchas ambiciones. Su objetivo: tener una gran empresa y enamorar al encantador Rodrigo Herrera. ¿Podrá conseguir ambas cosas? ¿O será tarde antes de que algo o alguien los separe?