ii.

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La campana sobre la puerta que indicaba que alguien había entrado al bar sonó y Hugo levantó la vista inmediatamente. Una sonrisa fugaz pasó por su rostro al darse cuenta que era la chica del girasol.

Nunca habían hablado, pero Hugo disfrutaba observándola. Inexplicablemente, le daba paz. Hizo una seña a su compañera de trabajo, quien se dirigió a atender a la chica. Hugo no se animaba a acercarse.

Siempre pedía lo mismo, un expresso y un croissant. Él lo sabía porque trabajaba en la caja.

Tenía curiosidad por el girasol que llevaba siempre con ella. ¿Tendría un significado especial? No lo sabía pero se moría de curiosidad por preguntarle.

Sin embargo no lo hizo y así, al igual que todas las veces, la joven se fue, dejando a Hugo con la intriga y la certeza de que la volvería a ver la semana siguiente.

Sunflower || Hugo WeasleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora