Shiverland

Capitulo 2

2.Sueño

-Señorita Breyden-

-Lian- los dos reimos incómodamente.

-Por favor- el abre la puerta mientras le agradezco y entro al carro.

-¿Porque la limosina esta vez?-

-Su madre la pidió, revise la caja que le dejo-

Tomo una caja que estaba debajo de mi asiento para dentro encontrarme una mascara de alambre aterciopelado con un diseño de nariz puntiaguda, ojos en rombos algo cerrados y un diseño de rulos.

-Hoy en día hay que ocultar la identidad- medio sonrío y le agradezco.

...........

Nunca en mi vida había hecho un viaje tan largo en coche.

Sentía como si hubieran pasado dos horas y media, ya había terminado el libro y checado todas mis redes sociales por lo menos tres veces cada una.

Cambio el álbum de música a otro por quinta vez antes de que se me caiga al piso y se deslice al otro lado del coche. ¡Genial!

Voy por el y lo tomó.

-Señorita no quiero asustarla pero nos están siguiendo-

-¿Que?¿Quién?- volteó para cada lado de la limosina.

Que idiota soy, todos los vidrios están empañados.

Tendremos que desviarnos, a menos que quiera que algo peor pase.

-Nos desviaremos, llegaremos mas tarde de lo esperado-

-¿Cuanto...? Esta bien solo piérdelo-

No me importa si nos desviamos, es mas preferiría regresar a casa pero no seria muy inteligente.

-No se mueva- El coche arranca con tal velocidad que me acomoda en el asiento. Abrocho mi cinturón y hago lo que me dijo Lian.

Estos son los momentos en los que prefería mil veces tener mas mi pequeño Aston Martin mas que esta limosina.

Me sentía en una carrera de coches clandestinos.

Lian avanza y llego a ver que estamos a 150 km/h antes de que me regrese la limosina a mi lugar.

-Lo siento- Lian no dejaba de decir eso cada vez que esquivaba un golpe del coche que nos perseguía.

-Esta...- siento un golpe en el lado izquierdo.

-¡Lian!- es se espanta con mi grito.

-Lo....lo siento señorita-

-¡Olvídalo! concéntrate en la carretera.-

¿Que quería o porque nos persigue? Estábamos a 180 km/h en una zona de hielo.

-Lian, no creo que ...- voltea bruscamente su cabeza hacia mi.

-¡Allison, Cállate!- La limosina se derrapa y chocamos contra un roble.

-¿Lian, estas bien?-

No me responde.

-¿Lian?-

-Silencio y escóndase.-

-Pero..-

-Allison, no rezongue- Se veía enojado así que hice lo que que me dijo.

Alguien abre la puerta de Lian y lo saca antes de golpearlo sin cesar en su pecho, costilla y estomago.

-¿Donde esta!-

Lian no responde. El hombre camina y regresa después de un tiempo.

-Te lo explicaré, sino me respondes este fierro golpeara tu cabeza repetidamente hasta que desangres si no me contestas-

-No- me tapo la boca al saber que el sonido salió de mi boca.

-¿Que fue eso?- Me hago mas pequeña detrás del asiento.

La cabeza del hombre choca contra el barrote del asiento gracias a Lian, lo saca fuera del auto.

No soporto mas y me asomo por la puerta abierta antes de que el fierro golpe al abdomen de Lian, en menos de un segundo estoy cubriendo su cuerpo y doblando el fierro en dos.

¿Como hice eso?

-Eres tu, no sabes lo feliz que se pondrá Alexander al saber que si existes.-

Me esquiva y toma a Lian lejos de mi con un mano en su cuello y otra en el la cabeza.

-¡Entra al coche! O tu amigo muere-

- ¿Que, porque?-

-¿No quieres?Okay- El cuello de Lian truena y cae al suelo.

-¡NO!- abro los ojos mientras caigo del sillón de la limosina.

-¿Esta bien señorita?- me levando y me acomodo de nuevo en el sillón.

-S....si- ¿lo estaba?

-Ya llegamos- el baja del lugar del copiloto para abrir mi puerta.

-Bienvenida a la casa de los Regnault-