Enoch O' Connor

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Pedido de -_Im_Elle_-

-Enoch ya baja- la chica golpeó por tercera vez la puerta.

-ya voy- le respondió una malhumorada voz.

-bien- se alejó de la puerta para bajar las escaleras.



Cuando los dos estaban ya abajo, Miss Peregrine sopló su pipa y los miró fijamente.

-¿hicimos algo malo?- preguntó ______ bastante desconcertada ante la mirada de la directora.

-no no- volvió a soplar su pipa. ______ movía su pie constantemente a causa de la impaciencia- bien, los llamé porque necesito que salgan del bucle porque se ha rumoreado qué hay un peculiar vagando por la isla-

Los niños la miraron sorprendidos, aunque a Enoch no se le notaba demasiado, no era muy expresivo. ______ al instante se emocionó, por fin un nuevo amigo con el que pasar el rato, tenía varios amigos en la casa, pero ya se le hacía costumbre y quería algo nuevo.

-necesito que tengan sumo cuidado- siguió- no han habido reportes de... huecos, pero por si acaso cuando detectes uno- miró a _____- no piensen dos veces en volver a casa lo más rápido que puedan-

Ambos asintieron. Y es que, ______ no podía ver a los huecos ni controlarlos, si no que podía sentir sus pensamientos de forma telepática, esa era su peculiaridad, la telepatía (leer mentes).

Los niños se despidieron, bueno, más bien ______ se despidió, pues Enoch simplemente salió de la casa suspirando con pesar.

Al salir del bucle a ambos les dio un escalofrío. Hacía años que no salían de ahí. Sin embargo actuaron como si nada.

Cada vez que _____ comenzaba una conversación Enoch respondía de manera cortante y breve para que ella se aburriera de seguir hablando y se quedara callada.

Cuando por fin se quedó callada Enoch sonrió victoriosamente, claro que la escondió al instante para que no lo viera. Minutos después la chica volvió a hablar.

-¿por qué estás nervioso?- Enoch paró en seco y la miró con las cejas fruncidas.

-te he dicho muchas veces que no puedes leer mi mente sin mi permiso, o sea nunca- la espetó.

-es que estoy aburridaaaa- alegó alargando la última A.

-aguántate- siguieron caminando.

-no respondiste mi pregunta- insistió.

-que no estoy nervioso- la chica suspiró.

-ojalá me hubieran mandado con alguien más- susurró pero Enoch la escuchó.

-te escuché, y no creas que eres la única que piensa eso-

-era mi intención que me escucharas- ni siquiera se miraban, solo seguían caminando.

Al rato ______ paró en seco y puso ambas manos en su cabeza cerrando los ojos. Enoch se alarmó, pero como siempre no lo demostró.

-¿que pasa?- la chica no respondió, solo se quedó en la misma posición- ¿que pasa?- repitió.

-ssshhh- lo cayó- trató concentrarme. Ambos se quedaron en un silencio un tanto incómodo para Enoch. Finalmente la chica se quitó las manos de la cabeza y abrió los ojos como platos.

Miss Peregrine One-ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora