Strawberry milk (Larry Stylinson)

XX

Cuando Louis se despierta horas después esa mañana, los recuerdos de lo que pasó hace unas horas todavía están frescos en su cerebro, seguido con un dolor en el pecho. Se preocupa un poco, notando el silencio a su lado, el espacio solo. Sabe que no debería entrar en pánico, pero hay algo que siempre le inquieta cuando no encuentra a Harry a su lado al levantarse.

Así que sale de la cama, y se pone el par de calzoncillos que están en el suelo. Se sienten bastante grandes como para ser suyos, pero le gusta comprarlos así. Al abrir la puerta y caminar al otro lado del apartamento siente el olor a desayuno. Harry está ahí. Sigue ahí.

Louis tuvo un sueño, pequeño pero importarte. Y él simplemente quiere ser capaz de caminar detrás de Harry, envolver sus brazos en su cintura, y presionar sus labios contra su cuello. Susurrar cosas dulces o perversas contra su oído, morder su piel. Quiere ser espontáneo con Harry, quiere sorprenderlo, tocarlo, y sentir que cada parte de él es suya también.

Sin embargo no puede.

Porque nunca sabe qué le recordará a él. Tiene miedo de envolver sus brazos en sus caderas y que Harry piense que no es Louis.

Siente que siempre tiene que preguntarle a Harry directamente antes de tocarlo.

Y no es como si- él nunca tocaría a Harry cuando no quiera ser tocado, siempre pararía por él- aunque eso no quiere decir que no quiere estar abrazado a él en el sofá, y poder pasar lentamente sus dedos por su piel, besar su cuello, o hacer que escalofríos recorran su cuerpo mientras se olvida lo que está en el televisor y se concentra en las manos de Louis. Louis simplemente quiere hacer sentir bien a Harry de todas las maneras posibles.

Y eso es lo que Louis piensa mientras se recuesta sobre la pared, viendo a Harry preparar dos sandwiches para el desayuno. Su dulce voz llena el aire de la habitación, y Louis puede estar equivocado, pero piensa que la canción es 'XO'. Su cabello es una mata de rizos rebeldes, y sus labios se ven suaves y rosados contra su pálida piel. Louis puede ver sus pestañas formar pequeñas sombras sobre sus mejillas, y sus músculos moverse debajo de su piel fluidamente con cada paso que da. Todo sobre él es tan hermoso, tan cautivador.

"Buenos días bebé," finalmente murmura con una sonrisa en su cara.

Harry levanta su mirada, mostrando sus hoyuelos mientras junta sus labios para un beso. "Buenos días para ti también," murmura contra los labios de Louis, besándolos despacio.

Y es como si nada hubiera pasado.

Harry se separa con una sonrisa, y Louis se voltea para buscar algo en el refrigerador. "En tu camino a clase, crees que podrías comprar un poco de-"

"-leche de fresa. Lo haré amor," Louis le lanza un guiño, decidiendo tomar un poco de jugo de naranja que tienen. "¿Y qué hará Harry hoy?"

Harry no quita su vista de donde está cocinando el tocino, pero Louis puede ver la pequeña sonrisa sobre sus mejillas. "Bien, Harry iba a ver unos cuantos episodios de Top Gear y estudiar para el exámen de mañana, a menos que Louis tenga otra cosa en mente."

Louis asiente, sonriendo mientras le roba el pedazo de tocino que Harry estaba poniendo en uno de los sandwiches. "La única cosa que Louis tiene en mente es una cita ¿esta noche?" Él levanta una ceja, sonriendo tímidamente aunque ya sabe la respuesta.

"Harry está muy ocupado, pero seguro encontrará un espacio para una cita en su agitado día."

Y siempre pretenden como si nada hubiera pasado.

*

En algún lugar en la mente de Louis piensa que debió haber ido a su clase de ciencia. Pero en vez de caminar hacía la izquierda, caminó hacía la derecha, la universidad se convirtió en un edificio de apartamentos, y el dulce olor de Harry se convirtió en esta mierda. Louis arruga su nariz mientras busca el jodido departamento de Niall.