CAPITULO 11

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Aunque Chen y Luhan habían recordado que Sehun no confia en la palabra de los medios, Sehun no podía dejar de hacerlo. Recordando las duras frases dirigidas a él, Sehun quería esconderse en un rincón y llorar. Pero no pudo. Yixing colocó su brazo alrededor de su amigo, jalando de él hacia su propio cuerpo.

“Una vez que esta noche llegue a su fin, vamos a enterrarlo en el pasado y seguir adelante con el futuro."

Sehun sólo pudo conseguir una sonrisa falsa antes de asentir solemnemente, “Estoy bien.”

“Usted obtendrá los $100 millones de seguro—usted puede demostrar a los periodistas que eres mejor que ellos. Y tú lo eres. Así que no dejes que sus palabras lleguen a ti, ¿de acuerdo?” Xiumin, usaba las palabras más antiguas para animar al más joven. Pero ni siquiera pudo levantar el estado de ánimo de Sehun en absoluto — ni siquiera un poco. Sólo le recordó sobre su tarea que era para la noche. Encontrar a Hana Park.

A medida que la pandilla de amigos entró al salón de baile, los ojos de Sehun buscaron a la chica de apariencia mediana. Sus ojos se clavaron en la esquina de la sala de baile donde toda la comida y las bebidas estaban metidas. Coincidentemente, allí estaba ella. Vestida con un traje de oro champán, Hana Park era una belleza natural.

Sehun no se atrevió a apartar los ojos de la diosa que estaba a varios metros de distancia de él. Tao susurró, “Sehun, simplemente piérdete esta noche. He oído de Kris hyung que los paparazzi no están permitido entrar en el salón de baile, por lo que estarás libre para vagar alrededor.” La mitad de Sehun estaba eufórico al oír esto, pero la otra mitad de él se acordó de los comentarios sarcásticos realizados por los periodistas.

Los ojos de Sehun se endurecieron. Iba a probar a los reporteros malos. Cómo? Cortejando a Hana Park. Aunque sabía que Kai se interpondría en el camino entre él y su objetivo, no dejaría que este hecho disminuya su cantidad de optimismo. Sabía sobre Kai desde cuando eran pequeños hasta que lo vio madurar a lo largo de los años. Kai no podía sólo adherirse a una chica—ya que el era un Casanova, después de todo. Con orgullo a la altura de ese título.

Además, cuando Oh Sehun fija una meta,va a hacer todo lo que esté a su disposición para llegar a él. No iba a dejar que su amigo de la infancia sea una sombra, al igual que lo había hecho en el pasado.

                                                                 ****

Pasos tronaron detrás de mí, haciendo que mirara hacia atrás. Fue uno de los varios empleados que trabajan en la gala de esta noche. Me pregunté cuánto ganaban—salario mínimo? Por supuesto que no. Los Byun creían en la igualdad para todos, ya sea dinero o la política. Él inclinó la cabeza mientras hablaba con solemnidad. “Su hermano y su padre no estarán asistiendo a la gala de esta noche. Recientemente llamaron y nos dijeron que le notifique”.

Fruncí mis cejas en confusión. “¿Sabes por qué?”

“Los negocios, al parecer. Si eso es todo, señorita Park, me iré”.

“Sigue , adelante.”

                                                                 ****

Decidí tomar  aire fresco antes de regresar al interior. Yo no quiero actuar como una solitaria, aunque yo lo era, y además, yo prefería el aire libre más que el interior del edificio sofocante. Yo no podía culpar a Kai por dejarme atrás, después de todo, era todo una actuación. Yo ya no era su prioridad, y yo aún tenía que registrar ese hecho en mi cerebro.

Inclinando mis brazos en la barandilla, me quedé mirando las estrellas. No eran muchos, y yo sólo podía distinguir la Osa Mayor en el cielo nocturno. Seúl es muy parecido a Los Ángeles, en los Estados Unidos. Ambos fueron contaminados por el horizonte de la ciudad resplandeciente. Era una lástima perder la oportunidad de los hermosos diamantes en el cielo. Pero creo que es un precio que las ciudades- y que las personas deben pagar. Sólo he visto un cielo nocturno en su apogeo cuando estaba acampando con mis amigos en las montañas.

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