𝑆𝑎𝑙𝑣𝑎𝑡𝑜𝑟𝑒 | 𝐾𝑜𝑙 𝑀𝑖𝑘𝑎𝑒𝑙𝑠𝑜𝑛 𝑦 𝑡𝑢 (𝑇𝑜 𝑦 𝑇𝑣𝑑)

Siete

Un día nuevo había comenzado, baje  a la cocina, tomé algo de sangre de la que mis hermanos guardaban y fui a la sala, la casa estaba vacía, Damon había ido a no se donde y Stefan claramente seguía al mando de Klaus.
Las horas pasaban y Damon no aparecía, eso era muy raro, tomé mi teléfono y lo llame con al esperanza de que contestará.

- ¿Dónde demonios estas?- pregunte sería

Damon- Calmate, hermanita, estamos en camino a buscar a Stefan- respondió y pude imaginar su sonrisa

- ¿Estamos? ¿Alaric está contigo?- pregunte curiosa

Elena- De hecho soy yo- respondió sin más

- ¿No pudieron decirme sobre su plan?- pregunte molesta

Damon- Ya estamos muy lejos, iremos a la ciudad de los vientos

- ¿Chicago? ¿Stefan y Klaus están allá?- pregunte pensativa

Damon- Si, es lo más posible, así que ni se te ocurra...- dijo pero colgué antes de que dijera algo más

Klaus nunca se va sin sus hermanos, eso quiere decir que Kol está en Chicago, en un féretro, pero esta. Salí de la casa y fui a la cochera por mi auto, lo encendí y comencé a conducir directo a Chicago. No sabía en cuantas horas llegaría, pero en todo el camino pensaba en mis tiempos en Chicago con la familia original, recordé muy poco un lugar era algo parecido a un almacén, tenia una corazonada que me decía que Klaus podía tener a sus hermanos ahí, donde más esconderia féretros. Llegaba a Chicago, la noche ya se hacía presente, detuve mi auto en el almacén, al entrar pude ver a un guardia tirado en el piso desangrado,  entre sin hacer ruido, sentí que alguien me tomo del cuello y me acordado en una caja grande de metal.

Rebekah- ¿_____?- pregunto confundida

- Es bueno verte de nuevo- respondí con una sonrisa y me bajo para abrazarme

Rebekah- ¿Donde está Niklaus?- pregunto mirando a su alrededor

- No lo se, pero fue suerte que encontrará este lugar, ¿Kol está aquí?- pregunte con esperanza

Rebekah- ¿Quieres verlo?- pregunto con una sonrisa y asenti

Ella me tomo de la mano y caminamos hasta los grandes estantes, ahí estaban los féretros, Rebekah me señaló el que era de Kol y lo abrí.

- Por Dios- susurre y cubri mi boca- Crei que jamás lo volvería a ver- agrege y puse mi mano sobre su mejilla

Rebekah- Espero que Niklaus le quite la daga pronto, si lo hizo conmigo es porque debe de necesitar algo

- ¿Porque no se la quito ahora?- pregunte tomando la daga

Rebekah- Es mejor que esperes, ya sabes en donde está y que está bien

Yo mire a Kol, Rebekah tenía razón, Klaus debía de ser quien la quitara, si lo hacía yo, el volvería a clavarla.
El tiempo pasaba y Rebekah tenía hambre, salí del almacén en busca de algún aperitivo humano, cuando por fin lo encontré lo hipnótice, volví al almacén y pude escuchar más voces, era Klaus.

- Al fin te encuentro Niklaus- músite entrando

Klaus- ¿Cómo lo hiciste?- pregunto acercandoce a mi

- Respondiendo a tu pregunta, Klaus, vivi con ustedes un tiempo en Chicago, conozco cada uno de tus pasos

Klaus- Eres astuta, no puedo negarlo, pero no puedes quedarte- expresó serio

- ¿Porque no?- pregunte confundida

Klaus- Algún día lo entenderás- dijo y me miro fijamente- Cuando salgas de aquí, olvidaras este almacen, tu no me viste y volverás a Mystic Falls

Yo salí del lugar contra mi voluntad, subi al auto y lo encendí,  comencé a conducir, en el camino sólo vi un letrero que decía que estába saliendo de Chicago.

- ¿Qué hago aqui?- pregunte a mi misma

Tome mi teléfono y llame a Damon, no sabía que hacia en Chicago, pero talvez el si lo haria.

Damon- ______, ¿Dónde estás?- pregunto en un tono de enojo

- Saliéndo de Chicago, ¿Sabes porque estoy aquí?- pregunte confundida

Damon- ¿No recuerdas?- pregunto confundido

- No, Damon, por eso te llame, voy en camino a Mystic Falls- respondí sin más y colgué

En el camino trataba de recordar, pero no obtenía nada, en un punto me esforze de más y logre verla.

- Rebekah- susurre y detuve el auto en seco- Ella habló conmigo- dije en un tono bajo

Las cosas seguían sin cuadrar, pero el a ver visto a Rebekah en mis recuerdos significaba algo y yo iba a averiguar que era.