𝑆𝑎𝑙𝑣𝑎𝑡𝑜𝑟𝑒 | 𝐾𝑜𝑙 𝑀𝑖𝑘𝑎𝑒𝑙𝑠𝑜𝑛 𝑦 𝑡𝑢 (𝑇𝑜 𝑦 𝑇𝑣𝑑)

Treinta y nueve

Rebekah, Klaus y yo volveríamos a New Orleans, Hayley y Elijah se quedaron con Hope en la casa que estaba alejada. Ya era de noche y yo me dispuse a dormir en todo el camino. Sentí que me movían, baje del auto y entre a la casa Mikaelson, iba a subir a dormir, pero me detuve a escuchar lo que Klaus tenía para decirle a Kol.

Kol- ¿Viaje largo?- pregunto acercándome a el

- ¿Se nota mi cansancio?- pregunte sonriendo a medias

Klaus- Escuchame Kol, cualquiera que sea el rencor que tienes contra mi, lo hacemos por el bien de la familia, tengo tu palabra por primera vez, ¿La honraras?- pregunto serio

Kol- Tienes mi palabra, Nik, lo juro por todos nosotros- respondió asintiendo y me miro

Klaus- Te daré la estaca- informó sin más y se alejó

Kol tuvo que irse, tenían un plan contra Esther, yo me quede con Klaus afuera del cementerio, no sabía dónde estaba Rebekah.

- ¿A dónde enviaste a tu hermana?- pregunte sería

Klaus- Con madre, al igual que Kol- respondió con media sonrisa

- ¿Crees que funcione tu plan?- pregunte atenta

Klaus- Si Rebekah lo hace al pie de la letra, lo más seguro es que funcione- respondió amable- Es hora de intervenir- informó y corrimos adentrandonos al cementerio

Logramos ver a Esther, Rebekah y Kol, cerca del área donde se hacían los rituales, Klaus subió a una tumba y yo me acerqué por abajo.

Klaus- ¡Madre! ¡Deten el hechizo! Tu y tu hijo traicionero- grito molesto

- ¿Qué está pasando?- pregunte confundida

Kol- Yo no sabía nada, lo juro- dijo desde atrás

Esther- Que bueno que te reuniste con ellos Kol, me preguntaba que habías hecho todo este tiempo- expresó sería

- ¡Deten el hechizo, Esther!- grite acercandome

Esther- Me temo que es imposible- negó observandome

- No es posible- dije acercándome más

Klaus- Tomame a mi- expresó junto a mi

Rebekah- ¡No, Nik!- grito con negación

Esther- Todos ustedes debieron de aceptar cuando les ofreci un cambio, por desgracia no me dejaron opción, sobre todo tu Klaus, asi que hice un trato con Mikael

Rebekah- ¿Mikael?- pregunto confundida

- Tu padre está de vuelta- respondi y mire a Klaus

Esther- Después de la desaparición de Kol y Finn, necesite un aliado nuevo, todo lo que quería era el derecho de matar a Klaus- informó con sinceridad

- ¡Es tu hijo! ¿Como puedes permitir algo así?- pregunte observandola con odio

Esther- _____, no te metas en temas familiares que no son tuyos- ordenó mirándome

Rebekah- Ella es de la familia, siempre ha estado con nostros- complemento acercandoce

Esther- Entonces, sufrirá igual que ustedes- informó y sentí como mi pecho comenzó a doler

- ¿Qué...haces?- pregunte con dolor

Kol- ¡Basta, madre!- gritaba con desesperación

Sentía como quería sacar mi corazón, antes de caer al piso, Klaus le encajo un cuchillo a su madre en el cuello, Rebekah cayó junto a mi y todo se tornó negro.
Abrí mis ojos, el pecho me dolía, mire a mi alrededor y cerca de mi, estaban Klaus, Marcel, Camile, Davina y Rebekah.

- ¿Qué pasó?- pregunte asustada

Klaus- Estarás bien, me alegra que despertaras, sólo falta Rebekah- respondió y mire a la rubia que estaba junto a mi

- ¿Despertara?- pregunte preocupada

Marcel- Aún no lo sabemos- respondió  decaído

Yo sali de ahí antes de que pudieran decirme algo, note que las afueras estaban decoradas con luces navideñas, hoy era víspera de Navidad y lo había olvidado por completo. Me detuve en una pared, puse mi mano en mi pecho y solté un gran suspiro.

Kol- ¿Estás bien, darling?- pregunto tomando mi mentón con su mano

- Lo importante es que tu lo estas- respondí con una sonrisa- ¿Podemos ir a caminar?- pregunte y el asintió

Tomo mi mano y comenzamos a caminar por el barrio francés, Kol se notaba algo feliz a pesar de la noche que habíamos tenido.

- ¿Porque estás tan alegre?- pregunte confundida

Kol- ¿Recuerdas la víspera de Navidad de 1914?- pregunto y asenti

- Fue la noche que buscabas un diamante con desesperación y ademas tuve que ver como Niklaus te encajaba la daga por primera vez- respondí pensativa

Kol- Esa noche, Rebekah juro que no le diría a Klaus sobre el diamante, pero no fue lo que hizo... estuve en deuda por mas de un siglo, hoy pude pagarle el favor

- ¿Porque me dices todo esyo?- pregunte confundida- ¿Qué fue lo que hiciste?

Kol- No te preocupes, Darling, no le haré daño a Rebekah, pero tampoco preparé a Angelica Barkley, preparé a alguien más- respondió sin gesto

- ¿A quién preparaste?- pregunte atenta

Kol- Bueno, Klaus no sólo me castigo a mi por robar el diamante, también  castigó a mis brujas amigas, las encerró en la cabaña lejana de Folin

- ¿Ese lugar tan horrible?...Kol, dime que no hiciste lo que creo- expresé preocupada

Kol- Durante las últimas décadas, ha sido un lugar con todo tipo de castigos para las brujas, estoy seguro de que Rebekah estará muy cómoda en una prisión creada por Klaus

- No lo hiciste, no encerraste a tu hermana en ese lugar- dije con esperanza de que fuera una broma

Kol- Claro que si, además con Rebekah desaparecida, terminaré lo que empecé con Davina...¿Estarás de mi lado?- pregunto mirándome con firmeza

- Sabes que sea lo que hagas, siempre estaré de tu lado, Kol Mikaelson- respondí con media sonrisa

Kol- Esa es mi chica- asintió devolviendome el gesto- ¿Recuerdas los deseos que solíamos pedir y después quemar?- pregunto pensativo

- Como olvidarlo- respondí recordando

Kol- Se que no hiciste tiempo de pedir un deseo, asi que lo hice por ti- susurro y me tomo de la cintura para apegarme a el- Cierra los ojos- susurro de nuevo y obedeci

Aparto sus manos de mi cintura y las puso en mis mejillas, acercó mi rostro al suyo y unió nuestros labios en un beso.

- Feliz víspera de Navidad, Amor- susurre divertida y volví a pensarlo 

Kol y yo volvimos a la casa Mikaelson, al entrar pude ver el cuerpo de Rebekah dentro de su féretro, Marcel y Klaus nos observaban, nos acercamos y mire a la rubia tan apasible. Note que Kol sacó algo de su abrigo y era la estaca de roble blanco, se la dio a Klaus y tomo mi mano.

Kol- Una promesa, es una promesa- expresó asintiendo con seriedad