MAGI (harem) prt 3

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Anime: magi

Caminando con cansancio hacia su cuarto un suspiro cansado salió de sus labios y sintió su cuerpo cada vez mas pesado con cada paso que daba. Quería llegar a su habitación, ponerse una pijama y dormir durante todo un día completo. No era nada fácil tener que cuidar a cuatro hombres que se la pasaban peleando entre ellos y aun así querían tener un acuerdo para el comercio entre sus países

Suspirando una vez mas miro con una pequeña alegría la puerta de su habitación. En ese momento le parecía que brillaba con una luz sagrada, por fin iba a poder descansar, había estado trabajando todo el dia y caminando de un lado a otro por el palacio, fue un trabajo agotador, y fue aun mas agotador el tener que estar esquivando a los cuatro hombres tan tercos como mulas

Gimiendo con cansancio abrió la puerta de su habitación y la cerro detrás de ella en cuanto entro. Con cuidado se quito la ropa y se puso la pijama mas cómoda que tenia para dormir, pero antes de que si quiera pudiera poner una mano en su cama la puerta se abrió de golpe mostrando a un simbad sonriente.

"durmamos juntos" sus palabras resonaron en la habitación con alegría "te aseguro que dormirás mejor estando a mi lado"

Ella solo lo miro atontada un segundo antes de que un ceño fruncido apareciera en su rostro. sintió como su cuerpo se tensaba haciendo que el cansancio creciera

"no, sal de mi habitación, quiero dormir en paz"

Simbad alzo una ceja ante sus palabras, pero aun así la sonrisa en su rostro no cayo y tampoco salió de la habitación

"incluso podemos..."

No pudo terminar lo que iba a decir porque la puerta de su habitación se abrió nuevamente, esta vez mostrando a un muu enojado que miraba a simbad con ojos fríos, antes de que su mirada se suavizara al ver a kagome

"no duermas con ese maldito mujeriego, duerme conmigo"

El ceño fruncido de kagome creció aún más al escucharlo. Solo quería ir a dormir en paz

"kagome no necesita a un idiota que solo sabe pelear"

Muu frunció el ceño, pero rápidamente le dio una sonrisa burlona

"tampoco necesita un mujeriego idiota"

Ambos se miraron con ira listos para pelear entre ellos, pero una vez mas fueron interrumpidos por dos invitados no deseados. Kouen entro por la puerta de la habitación, y judar entro por la ventana que había dejado abierta para que entrara la suave brisa de la noche, en ese momento se estaba arrepintiendo de haber dejado abierta la ventana

"no duermas con esos imbéciles kagome" la voz de judar sonaba burlona mientras hablaba de sus rivales "puedes ir a dormir conmigo, mi cama es muy suave y acogedora"

Kouen empujo a judar lejos de kagome y le dio una mirada molesta antes de mirar a kagome

"mi cama es grande y cálida, te aseguro que dormirás mejor conmigo"

Justo cuando kouen termino de hablar estallo una pequeña disputa entre ellos sobre con quien dormirá esa noche, y en menos de un minuto una pelea estallo haciendo que varios de sus muebles se rompieran y las paredes se agrietaran ante la fuerza con la que se lanzaban

Aun en su lugar miro de reojo a a la puerta viendo como los guardias llegaban a ver el escándalo, pero al ver lo que estaba pasando rápidamente huyeron no sin antes darle una mirada de lastima y preocupación. Ella los miro con casi lagrimas en sus ojos queriendo ir con ellos y salir de esa maldita pelea sin sentido. Su cuerpo estaba pesado, tenía mucho sueño y estaba cansada

"suficiente" sus palabras atravesaron la habitación como un cuchillo "quiero dormir, estoy cansada, mi cuerpo se siente pesado y no están ayudando"

Ante sus palabras inmediatamente se detuvieron. Kagome los miro con una mueca y sin pensar se subió a la cama se cubrió con su suave colcha y hablo con voz cansada casi quedándose dormida

"no me importa lo que hagan, solo no me despierten"

Parpadeando se miraron entre ellos antes de mirar la cama de kagome. era muy grande, lo suficientemente grande como para que todos ellos se recostaran. Se quedaron en silencio un momento antes de hacer una pequeña tregua esa noche

Kagome abrió los ojos levemente cuando sintió como la cama se movía y se hundía ante los nuevos pesos que estaban encima. alzando ligeramente su rostro vio con sorpresa como los cuatro habían terminado colándose a su cama y la miraban con sonrisas victoriosas en sus rostros

Suspirando cerro los ojos y los ignoro a favor de descansar. No quería lidiar con ellos en ese momento, ya los regañaría por la mañana cuando hubiera descansado y tuviera toda su energía con ella

¡REGALOS! 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora