¡REGALOS! 2

LOKI

Pelicula: los vengadores

Kagome se movió con rapidez por los pasillos del gran castillo dorado mientras saludaba con alegría a los guardias y a las diferentes personas que pasaban a su lado mientras corría. Hace varios meses había llegado a ese extraño lugar llamado asgard

Desde el primer momento en que la vieron fue aceptada casi al instante al notar que era una sacerdotisa, y su aceptación aumento a admiración al notar que ella era la última sacerdotisa que existía aun conservando un gran poder. Cada dios de ese lugar quería tenerla en sus manos, pero al mismo tiempo eran conscientes que la decisión final era de ella, así que simplemente se dedicaron a cortejarla con la esperanza de que ella los aceptara

Recordando los últimos meses sonrió ligeramente. Al principio había estado muy desorientada y asustada por todo, pero logró encontró a una persona con quien apoyarse, loki el dios del engaño. Al contrario de todo lo que decían para ella era un buen hombre

Giro por una esquina del pasillo y sonrió al ver una habitación familiar. Sin dudar tocó suavemente la puerta un par de veces y al escuchar el sonido de pase se adentro rápidamente a la habitación viendo a loki moverse por el lugar con un libro en su mano

Al verlo corrió hacia él y antes de que siquiera pudiera decirle algo se lanzó a su pecho abrazándolo con una gran sonrisa en su rostro. Al sentir el repentino abrazo loki se tensó ligeramente antes de relajarse y sonreír mientras sujetaba su libro con una mano y con la otra tocaba suavemente la espalda de kagome

Kagome era la única persona que lo tocaba, ni siquiera su madre lo tocaba tanto como kagome. Era algo extraño y a veces un poco desconcertante, pero al mismo tiempo era agradable. Era especialmente satisfactorio cuando kagome lo tocaba cariñosamente frente a todos, le daba mucha diversión y satisfacción ver las caras de celos e ira de los hombres que seguían a kagome como perros

"¿Qué haces aquí kagome?"

Al escuchar su pregunta ella se separó de él mientras le daba una gran sonrisa

"prometiste que me enseñarías algo interesante hoy"

Alzó una ceja, pero rápidamente sonrió con diversión al recordar lo que había dicho hace un par de días. Asintiendo cerró su libro mientras lo dejaba sobre un mueble que había a su lado

"entonces vámonos"

Al instante kagome tomó su mano y tiró de él sacándolo de la habitación mientras lo guiaba a una dirección aleatoria sin saber a dónde iba. Divertido por su comportamiento la siguió en silencio esperando en el momento en que ella se diera cuenta que estaba yendo en la dirección equivocada. Su expresión se suavizó al ver sus manos unidas, pero rápidamente cambió a una de burla y superioridad al notar la mirada celosa de varios guardias. No importaba cuanto intentaran cortejar a kagome, él sabía que terminaría siendo el ganador