HADES prt 3

2.2K 250 14
                                    

Historia: mitologia griega

Después de horas de luchar para deshacerse de la nueva marca de su brazo termino durmiéndose profundamente en su cama. Eran alrededor de la una de la mañana y toda la habitación estaba en silencio y completamente a oscuras, pero hubo algo que cambio. Lentamente en el suelo se fue abriendo un vórtice de color negro

Kagome estaba completamente inconsciente de lo que estaba pasando en su habitación. En silencio una mano salió del vórtice y se apoyo en el piso antes de que todo un cuerpo apareciera lentamente de la oscuridad del suelo

Un hombre con el cabello corto y tan negro como la noche miro a su alrededor con curiosidad antes de que sus ojos cayeran sobre la mujer que estaba en la cama. Sus ojos rojos brillaron un poco y se acerco a ella con pasos lentos mientras el vórtice negro desaparecía en silencio sin dejar un rastro

Su traje negó lo ocultaba perfectamente en la oscuridad mientras se movía, pero lo ignoro mientras observaba el rostro de la mujer. Tenia el mismo cabello que el pero el suyo era largo, piel blanca, rostro delicado y tenía una expresión suave en su rostro mientras dormía, eso había atraído su atención. Era raro ver a alguien tan tranquilo al dormir, usualmente solo veía expresiones de horror y miedo en sus rostros en el infierno

Sintiéndose mas curioso alzo su mano y con calma trazo con la yema de su dedo la mejilla de la mujer viendo con atención la extraña sonrisa que apareció en su rostro cuando la toco. Mientras seguía tocando el rostro de la mujer de reojo logro ver la mano que había marcado esa misma mañana

Aparto la mano de su rostro y tomo la mano de la mujer entre las suyas. Era pequeña y suave en comparación con la suya, pero lo que mas le gusto era como sus marcas coincidían a la perfección con las suyas. Con descaro y sin vergüenza se subió a la cama de la mujer y se recostó a su lado

Recostado a su lado empezó a tocar su cabello, sus mejillas, sus ojos, todo lo que pudiera tocar lo toco dejando su olor y también algunas marcas de protección que eran invisibles a menos que otro dios las viera. Se aseguraría que la pequeña sacerdotisa estuviera segura hasta que el volviera a encontrarla. No dejaría que nadie aparte de el la tocara, odiaba cuando tocaban lo que le pertenecía

Era un ser posesivo y receloso con lo que era suyo, y esa mujer no sería la excepción. Ante el pensamiento de que alguien pudiera tocarla o llevársela frunció el ceño y se levanto de la cama con cuidado antes de mirar la habitación con calma. Puso una mano en el piso y murmuro un par de palabras en otro idioma viendo con satisfacción como una marca aparecía en el suelo antes de desaparecer. Hizo lo mismo con toda la casa dejándola totalmente protegida a intrusos inesperados, pero principalmente siendo una barrera contra dioses

No dejaría que nadie se la llevara en su ausencia. Satisfecho con su trabajo regreso a la habitación de la mujer y camino hasta ella para tocar su cabello con cariño y una sonrisa apareció en su rostro mientras murmuraba en voz baja

"volveré por ti cuando termine mi trabajo en el infierno"

Cuando termino de hablar un vórtice negro apareció en el suelo y lentamente se fue hundiendo en él. Se la hubiera llevado en ese momento, pero sus malditos hermanos habían estado haciendo un gran revuelto en el olimpo y gracias a eso el infierno había estado ajetreado. Una mueca molesta apareció en su rostro, pero rápidamente se borró, solo necesitaba terminar su trabajo y entonces podría llevársela devuelta con el 

Kagome crossovers 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora