Laura es una chica que acaba de perder a sus padres y a su hermano en una explosión cuya onda expansiva le alcanzó, no le mató al contrario que a su familia, pero le dio habilidades cuyas son un poco difíciles de controlar, pero en ese cambio repent...
Me desperté en mi cama y con la cabeza apoyada en el pecho de alguien. Al girarme con cuidado me di cuenta de que era Steve y me estaba mirando.
-Buenos días. ¿Qué hora es? -Le pregunté.
-Buenos días dormilona, son las nueve de la mañana y por cierto felicidades. -Me dijo él mirándome sonriente.
-Gracias. Y siento lo del beso de anoche.
-¿No te gustó?
-Sí, claro que me gustó. -Dije yo sonrojada mientras él se reía.
-Era una broma. Creo que no deberíamos hablar de lo que pasó anoche, me refiero a que un simple desliz lo tiene cualquiera, y además con todo lo que está pasando, creo que lo mejor es que sigamos como si no hubiera pasado nada.
-Me parece bien Rogers. -Le dije no del todo sincera mientras me sentaba en la cama ya que aún seguía apoyada en su pecho, el copió mi gesto, en ese momento me di cuenta de que no llevaba puesta su camiseta.
Me quedé fijamente viendo su pecho, brazos y abdomen marcados, parecía hecho por los mismísimos dioses, era literalmente perfecto, creo que me acababa de enamorar más de lo ya estaba, aunque según él había sido un desliz, yo lo veía como algo más.
Él se dio cuenta de que lo estaba mirando y se dio cuenta de no llevaba pues la camiseta.
-Lo siento, pero tenía mucha calor y me la quité si quieres me la pongo.
-No, tranquilo, no hace falta que te la pongas. -Le respondí yo otra vez un poco roja, por dios Laura relájate o empezará a pensar que eres un tomate en vez de una persona.
Se hizo un silencio algo incómodo, pero fue interrumpido por el sonido de la puerta al abrirse y dejar entrar a un grupo de personas bastante animadas.
-¡¡¡Felicidades!!! -Dijeron todos los vengadores al mismo tiempo entrando por la puerta de golpe.
Todos se quedaron parados sin decir nada al ver al Capi sin camiseta y al lado mío.
-Bonito torso Capitán. Por cierto, Barton creo que he ganado la apuesta, a pagar. -Soltó Tony divertido haciendo que Steve le diera una mirada amenazadora.
-Ja. -Se rio Thor.
-¿A que se refieren? -Les pregunté yo.
-Tony apostó que después de la fiesta de tu cumpleaños acabaríais acostándoos. Clint apostó por que era demasiado pronto. -Explicó Bruce haciendo que Steve se avergonzara.
-No sabíamos que teníais algo. -Dijo Nat.
-No estamos saliendo ni nada parecido, y no es lo que parece, anoche no pasó nada. -Respondí yo.
-Ja, gané. -Soltó Clint mientras Tony le daba un billete.
-¿Vamos, ni siquiera se besaron? -Preguntó Tony.
-Eso si. -Le contestó Steve, parecía pensar cada palabra que decía.
-Bueno Steve, como ya sabes tenemos un regalo para Laura, así que creo que deberíais cambiaros para que podamos ensayárselo. -Dijo Natasha.
-Tiene razón, tenemos una sorpresa para ti. -Dijo Tony más ilusionado que nadie.
-Va daros prisa, te va a encantar. -Soltó Thor.
-Muchas gracias, pero no hacía falta que me comprarais nada.
-Eso es lo mejor, no es comprado pero puede ser una de las cosas más caras que existen.
Yo me quedé un poco intrigada sobre el regalo, pero cuanto antes nos cambiáramos antes vería que es.
Dicho esto Steve se fue a su cuarto a vestirse y yo me cambié una vez salieron todos.
Cuando ya estaba cambiada salí y ya me estaban esperando.
-Para darle más intriga vamos a taparte los ojos. -Dijo Clint mientras pasaba una venda de tela por mis ojos y luego la ajustaba por detrás.
-Por dios que nervios. -Dije mientras sentía que me cogían de los brazos.
Me estuvieron guiando hasta que paramos de golpe.
-Vale Laura, ya puedes abrir los ojos. -Me dijeron mientras me retiraban la venda.
Estábamos en el taller que Tony tenía en la base.
Delante mía solo había un maniquí de metal, me fijé que llevaba puesto una pulsera plateada con una especie de diamante morado en el centro.
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La pulsera era hermosa y me encantaba, pero no entendía el porque estaba en un maniquí.
-Chicos me encanta la pulsera, pero me la podíais haber dado en una simple caja. -Dije yo sonriente.
-La pulsera es lo de menos. -Dijo Tony. -Jarvis, despliega el traje 743.
Automática mente de la pulsera empezó a salir un traje negro con detalles morados que se ajustó a todo el cuerpo del maniquí.
-Que pasada, ¿y eso es para mí?
-Así es, este traje contiene una tela de fibra super resistente, y también, por petición del Cap lleva incorporados refuerzos de vibranium en las zonas de espalda, pecho y abdomen. _me explicó Tony mientras yo no podía de dejar de ver el traje.
-Pero el vibranium por ahora solo está en Wakanda, igual que la nanotecnología. -Dije yo.
-Por suerte el rey T'Chaka y yo somos amigos desde hace bastante tiempo, así que cuando le dije que buscábamos un traje con vibranium nos ayudó encantado. -Me explicó Steve.
-Me encanta el traje, pero ¿por qué?, me refiero a que no lo necesito. -Pregunté mientras me quedaba mirando el taje fijamente hasta que vi que en hombro derecho tenía el símbolo de los vengadores. -¿Y por qué tiene el símbolo de los vengadores?
-Porque te acabas de convertir en uno de ellos Laura. Aunque aún te queda mucho por aprender, creemos que ya estás lista para ir a misiones como una vengadora agente de S.H.I.E.L.D., siempre y cuando tú aceptes claro.-Me dijo Fury que acaba de entrar por la puerta.
-¿Enserio? Me encantaría formar parte de los vengadores y prometo esforzarme lo máximo que pueda, enserio muchísimas gracias por todo lo que estáis haciendo por mí. -Solté muy emocionada pero apunto de llorar.
-Estamos para ayudar. -Dijo Fury.
Después de eso volvía a mi cuarto para darme una ducha, después tendría que ir con Tony para que me explicara como funcionaba el traje, y luego iba a pasar el día con los demás, ya que era mi cumpleaños.
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