LAVANDA

-Nuevo comienzo-

Noschoa no estaba sorprendida en absoluto. Su madre la intentaba vender a personas por lo menos 2 veces al mes. La mayoria de las personas compradoras suyas eran pervertidos maestros de karate. Noschoa solo sobrivía de esas vendas diciendoles las cosas mas asquerosas que conocia mientras aún se hacia el contrato.

Pero algo en la manera de actuar de su madre la irritaba. Parecía que el hombre intentaba convenserla a ella. Y ella no al hombre. No importa se dijo. Ahora era su turno:

-Oye gordito;¿ como es que andas tan mareado ?, ¿Quieres romper el récord de la mayor porcion de LSD tomadas antes de morir?, ¿Cuantas drogas necesitabas ofrecerla a mi madre para que se pusiera de esta manera?, ¿Violaste otras personas en mi edad o soy la primera? Chupame mi pene operado conchatumadre.- dijo como si nada.

El tipo respiro hondo antes de hablar.

-Primero: me llamo Cedric. Segundo: no tomo ningún tipo de droga y no ando mareado. Tercero: no le dí ningúna droga a tu madre. Cuarto: no he violado ninguna persona en mi vida entera. Quinto:  chupamelo tu hueona de mierda.- dijo mirandola a los ojos.

Su texto fue estupendamente respondiente al suyo. Pero NADIE le puede mirar a sus ojos por mas de 10 segundos. Si alguien miraba a sus ojos, podía ver todo lo que quería decir. Las cosas que quería decir, eran cosas inexplicables con palabras. Demasiadas malvadas para una niña de su edad.

Pasaron 10 segundos, luego veinte, luego 1 minuto, luego 2. Por fin el hombre (Cedric?) apartó su mirada y volvio a mirar a su madre. Derrotado.

Noschoa se sentía humillada. Había sido casi-derrotada mirandole a alguien a los ojos. Lo que habia visto era: tristeza. Solo tristeza. No habia otro sentimiento. Ni siquiera deseo de venganza o rabia.

-Volviendo al tema; estoy seguro de que te has dado cuenta de que tienes un cuerpo muy débil. Eso, es tu capa exterior. Tu debilidad. Pero, también tienes una parte fuerte. Tu capa interior.

Tu no te asustas ni te demprimes con cualquier cosa. Solo lo tomas como otra noticia. Además, eres inteligente y no te demoras mucho en tomar conclusiones. Esa parte es la que necesito para una misión especial. Podría ser que mueras pero tu eres la única persona que existe para esa misión. Harás equipo con otras 4 personas que también tendrán algo especial en sus capas exteriores o interiores. No es para nada un juego de niños. Tendrás que venir conmigo por algunos años pero tu madre ya acepto. ¿Preguntas?-

Si. Noschoa tenía miles de preguntas. Pero antes de que pudiera hablar, Cedic la interrumpio de nuevo.

-Ahora que lo pienso, haz solo las mas importantes!- puto hueonazo. Algún día me iba a vengar por hacer que me quede como la desclacificada. Ya tenia suficiente de eso en la clase de educación física.

-¿Que es lo que debemos resolover, con quién voy a trabajar y que son las "capas"?- pregunté. Eso, sinceramente era lo único que podía peeguntar. Cedric lo había dejado bien claro.

-Ya dije que tenían que resolver un misterio, que harás equipo con otras 4 personas y lo de las capas...

Bueno, son algo como tus características físicas y psigológicas.

¿Vendrás?- dijo. Por algún modo parecía enojado. Pero Noschoa ya lo tenía decidido. Ella siempre se había preguntado como el mundo podía ser tan cruel y simple. No le costó para nada creer lo que ese tipo le estaba contando. Aunque sonaba MUY magico y con hadas de adorno.

-Pensandolo bien diría.... No. No tengo ningún interés.-

-Entonces no me dejas opcion.-dijo, casi susurrando. Sacó una botella chica, probablemente era algo para la autoproteccion.

Ni siquiera vio como se lo ponía sobre la cara.

Lo último que vio, fue su madre que lloraba mientras se caía de la silla