Shadow of my blood

II

Un hombre de altos rasgos y pecadora mirada, pasa por toda su manada dejando que un gran nido de ojos se posaran solo en él. La manada Jeon era una de las más fuertes y poderosas de todo el territorio de Corea que a lo largo del tiempo logro camuflarse con los seres simples o más bien los ''homo''.
Jeon Jungkook el hombre más rico de Corea y alfa de la manada, era el más cotizado por todos siendo un destello para todas las señoritas. Lo gracioso es que él jamás en toda su existencia sintio ese típico llamado para encontrar a su destinada y aunque todas las mujeres habidas y por saber se acercaban por una cosa específica, él nunca les tomaba atención.

Aún sintiendo la mirada de todos se sento en su gran asiento y con un destello sus ojos cambiaron a dorados provocando que todos esten quietos y serenos.

- Y bien, ¿que tenemos aquí? - pregunto Jungkook quién vio como cuatro niños se acercaban a él seguidos de su mejor amigo Taehyung quién custodia todo a su alrededor.

- Alfa... .- liberó de lo más tímida la niña de cabellos marrones .- Lo sentimos .- se disculpo y bajo la mirada.

- Lamento nuestra travesura .- habló el niño de mejillas regordetas quién también imitó a su amiga.

Jungkook aún sin comprender porque los pequeños se disculpaban llamo a Taehyung quién ni bien escuchó su nombre se acerco a él.

- ¿Que pasó aquí? .- preguntó.

- Salieron de la frontera convertidos en lobos .- el joven de voz gruesa negó con la cabeza dirigiendo su mirada a los cuatro .- Si yo no hubiera estado cerca de seguro hubieran sido atrapados por el cazador.

Jungkook destello de asombro e ira, miro a los cuatro pequeños quién al verlo bajaron la mirada, mientras tiritaban de miedo.

- Saben que está prohibido salir de la frontera .- solto amenazante .- ¿Pensaron en los peligros que pudieron generar, no solo a ustedes sino a la manada? .- casi gritó por sus últimas palabras provocando que los pequeños tiemblen de miedo.

- Lo sentimos mucho Alfa .- se disculparon en coro los pequeños.

Jungkook aceptó sus disculpas, pero como su padre siempre le enseño esa típica frase de ''Cada cosa mala siempre traerá consecuencias'' pensó en un castigo ideal para esos cuatro demonios. Taehyung lo miro y ya sabía lo que estaba pensando su compañero.

- Tienen prohibido entrar a la ala de los pequeños, cada uno se mantendrá en su habitación hasta que comprendan la falta que cometieron .- miró a cada uno .- Y por favor nada de peros, porque ustedes solitos se lo buscaron .- dictaminó el joven de cabellos marrones.

Los cuatro niños aguantaron las lágrimas y con pequeños hipos salieron corriendo a sus habitaciones dejando otra vez la sala llena de miradas solo al alfa, quién acariciandose el tabique pidió que todos salgan excepto su mano derecha.

Al encontrarse vacía la sala; Taehyung corrió donde su amigo y lo abrazó como si se tratará de una ilusión que pronto desaparecerá, siendo también correspondido por el otro.

- No sabes lo difícil es estar a cargo de la manada mientras tu éstas fuera .- dijo el otro alfa.

- Se que es difícil mi fiel amigo, pero mientras yo estoy fuera tú tomas cargo de las leyes de la manada .- dio palmaditas en la espalda contraria.- Y bien, ¿qué me tienes que contar? .- preguntó.

Taehyung sintió su cuerpo a flor de piel y dando un largo suspiro le dirigió la palabra a su compañero frente suyo.

- En las últimas semanas en nuestras noches de caza encontramos varias trampas escondidas a la lejanía. Algunos homo lograron descubrir nuestra ruta, pero fueron atrapados y sus memorias borradas, para finalizar las omegas están deslumbrando de olor, provocando que algunos alfas de nuestra manada se vuelvan locos.- terminó y miró al alfa con una mirada tan nula.