Shadow of my blood

III

El sonar de la entrada principal llamó la atención de todos aquellos quienes se encontraban cerca de esta, llevándose consigo una gran sorpresa de ver al alfa de la manada con una joven de piel blanca y suave como la nieve desnuda en brazos. Aún sin creerlo, miraban como los mismos ojos del jefe reflejaban que nadie viera nada de lo que era suyo por derecho.

- ¡¿Pero qué?! .- corrió Taehyung a su alcance aún sin comprender lo que estaba pasando.

- Prepara un baño de aguas tibias y dile a Jennie que lleve ropa de dama a mi habitación .- dictaminó y desapareció de los ojos de todos para que así dejarán de ver el cuerpo que era suyo.

Al llegar a la habitación, Jungkook recostó a la joven de hermosos cabellos oscuros como la noche a su cama, mientras trataba de controlar todo su ser; en especial a su amigo lobo que prácticamente luchaba para ganar el poder. Su lobo la quería reclamarla como suya y ese olor exquisito no ayudaba en nada a decir verdad, era tan igual al de algo que combinaba felicidad, lujuria, amor, posesión entre muchas cosas. Ella era su marca personal de perfume y él y su lobo no lo podían negar. Prácticamente la indefensa joven se encontraba en bandeja de plata para un lascivo lobo que encontró a su destinada.

Lisa se hallaba desmayada y su cuerpo ardía en fiebre a causa de su celo, pero con el pasar del tiempo un poco desorientada despertó y se retorció de dolor en la cama contraria. Su maldito cuerpo era igual a unas horribles púas que ingresaban y no salían por mas que desearas, ese era su celo.... su peor infierno.

El alfa se mantenía al margen y rezaba por controlar sus instintos, pero el olor despiadado que emanaba la jovencilla lo lleva al infierno y al cielo. Trataba de estar sereno mientras esperaba en la puerta a su fiel compañero, pero tras escuchar un quejido que prácticamente lo puso en alerta. Cerro la puerta y fue hacia ella, que al verlo retrocedió su cuerpo hasta chocar con la cabecera, pues ese alfa le transmitía miedo y a la vez tranquilidad, pero más aún esos ojos dorados le produjeron un cierto escalofrió.

Al ver a la joven hacer esa acción, el deseo de su alfa aumento y más aún porque dejaba a la vista los tentadores pechos y hermosa figura de la contraria.

~ mía ~ soltó su lobo posesivamente.

Y si, ella era "nuestra" , ella era nuestra destinada y mi amor exquisito que me hacia llegar hasta las nubes.

Sonriendo por su terror me fui acercando poco a poco sin perder el rastro de su rostro, pero en especial de esos ojos tan exquisitos que me suplicaban piedad y a la vez confusión. Mis rodillas chocaron el inicio de la cama, siendo este un impedimento a mi avance. Aun quieto; repase mi mirada en ella. Mi hermosa destinada se encontraba miedosa y a la vez frágil por su dolor, así que sin mas me adentre en mi propia cama aún con la distancia que nos dividía.

- No te.. te.. acerques .- soltó miedosamente tratando de hacer más distancia entre ambos.

Jungkook hizo caso omiso y de manera lenta fue cortando la distancia produciendo que la joven de melena negra abriera los ojos y buscara una solución.

- Alégate... por ..fa..vor .- pidió, pero el alfa ignoro el llamado .- No te acer.. ques AH ~ .- no logro terminar su próxima palabra pues su cuerpo la traiciono provocándole un dolor inmenso que la hizo chillar.

El alfa por instinto pego su cuerpo con el contrario para tratar de calmar a la señorita que lo traía loco con su aroma a vainilla. Mientras ella rara por el tacto ajeno se dejo consolar con las palabras del joven que se encontraba pegado a ella.

- Ya pasará .- le consolaba mientras acariciaba . cabellera negra.

Lisa solo soltaba hipitos y trataba de que sus labios no soltaran gemidos, pero su cuerpo pegado al otro, le provocaba soltar esos quejillos. Estar así, junto a él provocaba que se sintiera tranquila y su dolor disminuyera un poco, pero su loba saltaba de deseo y mucho más por el alfa que se encontraba a su lado.