Yo Decido

1 Nuevo Rey

Año 2003.

Narra Ester.

-Corre lo más rápido que puedas no mires atrás y recuerda te amo- mire los ojos violetas del papá de mi hermosa niña, el amor de mi vida, solo asiento pues mi voz no sale y con la mirada le digo te amo a lo que el asiente y me voy corriendo al bunker, al llegar al búnker pongo la contraseña y entro cerrando la compuerta, pego más a mí bebé a mi pecho dándole calor, y me transmite paz, una paz inmensa, volteo a ver a mi alrededor y hay muchas vampiras embarazada y otras con sus pequeños vampiritos en brazos durmiendo tranquila mente, las paredes son blancas, el suelo de madera y hay sillones, camas, comida, una estantería llena de libros, y lámparas alrededor de todo, no puedo creer que todo esto esté pasando a tan poco tiempo de que mi bebé nació, Ella es mi felicidad, mi vida, el tesoro más grande que tengo y nunca dudaría en protegerla con mi vida si es necesario y en este caso lo es, -Reina Ester- volteo al escuchar la voz del hijo de mi mano derecha Eithan, Eithan tiene 18 años es muy joven tiene el cabello café oscuro, ojos grises oscuro, nariz perfilada, labios gruesos y rosados, su piel es pálida y es muy guapo, y lo quiero como si fuera mi hijo y si algo nos llegará a pasar el sería el sucesor de todo hasta que mi niña cumpliera los 18 años que es cuando se transforman en vampiros y el apenas se transformo ase 5 meses y aún le falta entrenamiento pero aún así fue a la pelea es muy valiente y leal -dime Eithan- digo nerviosa por todo lo que está pasando y se que pasó algo lo puedo sentir -lo siento Reina pero el Rey Esteban a muerto igual que el jefe de los cazadores, pero los cazadores siguen atacando- termino de decir con la voz apagada/triste y llorando,

No lo puedo creer el amor de mi vida mi alma gemela el padre de mi hija a muerto,

~A muerto.

A muerto.

A muerto.~

Eso me está martillando la cabeza y siento que me quitaron una parte de mi, pero esto no se va a quedar así voy a matar a todos esos cazadores que quedan.

-Eithan- le digo con voz sería y me voltea a ver - toma a Emma - le tiendo a mi bebe y el la toma -si algo me pasa tu quedas como el Rey de todo hasta que mi bebe cumpla los 18 años- me mira con cara de horror al comprender que voy a salir -no Reina usted no puede salir de aquí- dice con un hilo de voz y con la cara de súplica -por favor- se pone a llorar, para el soy como una madre ya que a su madre la mato un cazador, -lo siento hijo pero la muerte de mi esposo no va a quedar inmune- sin esperar respuesta abro la compuerta y salgo la vuelvo a serrar y voy a el pueblo con una velocidad sobrehumana, cosa que tiene cualquier vampiro, al llegar veo por todos lados sangre, cuerpos sin vida, tanto de cazadores como vampiros.

Link con Jeremy.

-Jeremy dónde están los demás cazadores-

-Reina, no debió haber salido del búnker-

-no me importa lo que creas dime donde están esos malditos cazadores de una puta vez Jeremy- le digo enojada/irritada

-lo siento Reina, están en el lago atrás de la colina, son muchos y estamos atacando- dice con la voz sería, pero puedo escuchar nerviosismo

-voy para aya-

Fin del link.

Corté el link y me fui corriendo con mi velocidad sobre humana, fui tirando árboles, de mi camino al llegar me encuentro con una horrible escena.

Todos los vampiros tenían estacas clavadas en el corazón, las estacas no nos matan solo nos debilitan y el que tiene la estaca enterrada no se la puede sacar por qué se incrementa el dolor, tiene que sacársela alguien mas, todos están de rodillas ante una fogata que tiene un palo grande de madera y en el está mi esposo amarrado sin vida, el fuego aún no llega a el, así que con mi velocidad sobre humana, corro con cada uno de los vampiros con estacas y se las quitó en menos de un minuto todos están de pie, sin ninguna estaca y enfurecidos con los malditos cazadores, con la mano derecha la extiendo hacia delante y con la palma de mi mano controló el fuego y lo muevo para un lado haciendo que varios cazadores se quemen, mientras que los demás vampiros matan a los demás cazadores.

Cuando matamos a todos los cazadores y comprobamos que no hay ninguno más digo unas palabras -ganamos está pelea, y perdimos a nuestro Rey, quiero que festejen por haber ganado y en honor a nuestro Rey, vallan y diviértanse pasado mañana será el funeral- nadie dijo nada por unos segundos hasta que uno dijo

-por nuestro Rey- empezó a aplaudir y lo siguieron todos los demás -por nuestro Rey- dijeron todos al unísono y siguieron aplaudiendo, cuando vuelvo a ver a todos lados veo a Eithan con mi bebé en brazos y se que tengo que ser fuerte por ella, les doy una sonrisa y siento un dolor insoportable en mi pecho, miro mi pecho y tengo atravesada una flecha de oro, un guardia me saca la flecha y todos la ven con horror y al guardia se le cayó de las manos la suelo y la flecha tiene sangre negra, eso quiere decir que tenía veneno y no cualquier veneno sino uno que mata en minutos a un vampiro y ese es sobrofrodita, no siento mi cuerpo y caigo al piso veo a Eithan acercarse y arrodillarse con cara de preocupación/temor, con todas las fuerzas que me quedan le digo -Eithan, eres el nuevo Rey de los vampiros hasta que mi hija Emma cumpla los 18 años- no dice nada solo asiente llorando miro a mi hija -mi amor Emma, perdóname por no estar contigo más tiempo y espero que vivas feliz te amo- dije con todo el amor del mundo, Eithan me acerco a mi bebe y le di un beso en la frente como despedida, -Eithan, quiero que dejes a mi bebe en una manada en la que tú quieras y asegúrate de que la traten con cariño, y la cuiden quiero que viva con normalidad y que la aleje del peligro, un día antes de que cumpla los 18 años la traes a el castillo y que aquí se transforme y se aga cargo de su Reino- Eithan solo asiente y ni deja de llorar le tomo la mano con mis últimas fuerzas -Eithan, te quiero cariño, cuida este reino y a mi bebe, ya no llores- le doy un beso en la frente y miro a todos a mi alrededor con una sonrisa tranquilizante, todos están llorando desconsolada mente, fijo mi mirada en mi bebe y susurro -Te amo Emma- siento como todo mi cuerpo pesa y mis ojos se quieren cerrar y ya no lucho por qué se que es inevitable, poco a poco mis párpados se van serrando, asta quedar cerrados y ya no escucho nada ni siento nada solo una paz enorme y mi cuerpo ligero me siento libre.