Narrador omnisciente
A pesar de que el día poseía luz, no era tan difícil para los demonios salir del infierno, una leve brisa soplaba y el sol brillaba, su calor se extendía creando una gran satisfacción para aquellos que disfrutaban sus últimos días de verano, para algunos era el final del ocio y para otros era el final del encierro.
Muchos lo llamarían el gran escape, otros una falla policial, pero ella lo denominaba el día de su suerte, si miramos e indagamos desde diferentes puntos no encontraríamos como, ni tampoco donde, pero repasando el plan casi perfecto llegamos a una conclusión, no todo plan maestro es perfecto, la mejor de las suertes, es la peor de las fallas.
Miremos como sucedió
Mientras una cámara velaba por celda 34-B1 y grababa a una muñeca debajo de las sábanas, su reclusa se escabullía por un ducto de ventilación bajo su cama, descubierto después de que uno de los oficiales la follara salvajemente a cuatro patas contra el piso, al principio ella luchaba contra el gordo oficial que resguardaba su celda, olía a cigarros y comida rápida, pero después que él desgarrara su pantalón y apretara su cabeza contra el piso, algo plateado brillo contra la luz de la linterna del oficial encendida tirada a un lado de la cama, al darse cuenta de que el gordo le había regalado su libertad sonrío de manera siniestra, y sintió tal satisfacción que en cuanto su atacante empezó a follarla más rápido empezó a disfrutar, el oficial empezó a reír viendo como ella gemía de placer, hasta que una corriente ya conocida como un orgasmo la recorrió, enseguida se giró y abrió la boca recibiendo la corrida de su salvador, finalizado tal acto sonrío por última vez y envió hacia a fuera a un más que relajado oficial.
Se recostó en la cama y mientras soltaba un gemido de satisfacción empezó a maquinear todo, contaba el tiempo, miraba la infraestructura y pensaba en el momento perfecto y el cómplice perfecto hasta que cayó dormida plácidamente.
Dos días después decidió hacer una llamada a las 12 pm, era la hora donde otro de los oficiales de cabina se ausentaba para ir al baño, después de 3 llamadas sin contestación y la resignación a la rendición contestaron.
-Ciao chi parla?
-Soy yo idiota, ya tengo un plan, y tú me vas ayudar.
La línea se quedó en silencio durante casi un minuto hasta que la voz de un hombre respondió
-Jefa, siempre es bueno saber de usted, qué haremos?
Ella sonrío maliciosamente y dijo
-Vamos a hacer temblar este lugar
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REBEL
RomanceJayma no era cualquier chica, era "La chica", no era la mejor especificación ni tampoco el mejor nombre pero si su mejor historia, para el FBI era especial pero ¿Lo era para alguien más?A lo largo de toda su vida ha viajado por todo el país, de casa...