IV

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—¿En qué piensas?

—Sólo recordaba

—¿Supongo que pensabas en ella?

—Sí

—Ella era realmente agradable, aún lamento no haber hecho algo para ayudarlas.

—No es tu culpa. Nos ayudaste en todo lo que pudiste, no debes lamentarte si hiciste todo lo posible.

—Pero pude haber hecho más...

—No, sabes que... eso hubiera sido demasiado arriesgado, seria como haber vendido tu alma al diablo.

—Sabes que pude haberlo hecho, no perdía nada.

—Lo sé, pero hiciste todo lo humanamente posible.

—Pero...

—Eres tan terco.

—Claro, y la señorita Komori solo es una chica obstinada. — Rodó los ojos.

—Bueno, no creo que importe mucho ahora — suspire

Nos quedamos en silencio por un momento, embriagándonos de esa melodía que sonaba en la radio. Sin poder olvidar aquel entonces donde mi vida estaba en peligro, solo por haberme enamorado.

Pasan los segundos y te quiero más

Sólo de pensarte me hace suspirar

Nada se compara contigo

Si te tengo aquí cerquita conmigo

Tenía miedo, me sentía amenazada de que uno de ellos lo supiera. Pero como un ángel guardián Subaru me ayudo a librarme de ese idiota. Quien diría que al único que no le importaba el poder iba ser el malhumorado de Subaru. Eso ahora no importa, a pesar de todo eso, se que ella está bien aunque tuve que alejarme.

— Esa canción describe tu romance de aquel entonces — rió suavemente.

—Sí, eso parece

『Memorias de un romance』『Yui Komori』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora